Están de moda las piezas en blancos, grises e incluso pastel que aligeran el volumen y encajan en cualquier decoración. ¿Habéis probado a introducir un mueble de este tipo en el salón, recibidor, dormitorio, baño, cocina? El resultado es sorprendente.
Lo mejor de todo es que podemos transformar nosotros mismos cualquier mueble de este tipo con pintura a la tiza, la famosa chalk paint. Yo ya la he probado en algunos muebles de casa y no puedo estar más contenta del resultado. Por ejemplo, he transformado este cabecero y alguna cosa más. Pronto os enseñaré el último proyecto, que ha quedado realmente bonito.
Volviendo a lo que nos ocupa hoy, vamos a ver algunos ejemplos de cómo podéis reutilizar el viejo armario de la abuela, la alacena desvencijada pasada de moda… y sacarle todo el partido.
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