En mi caso, ya sabéis que opté por esta división en parte obligada por el reducido tamaño del dormitorio de mis hijas. Además, cuando les organicé la zona de juegos, mi hija pequeña que ahora tiene dos años era un bebé, y necesitaba que estuvieran conmigo mientras trabajaba, así que monté el cuarto de juegos en el mismo espacio que la zona de trabajo y el cuarto de invitados. Un año después estas necesidades han cambiado y hemos adaptado el cuarto de jugar, pero eso es algo que ya os mostraré más adelante.
Lo que sí quiero destacar son los elementos que yo considero imprescindibles para tener un cuarto de jugar en condiciones.
Almacenaje accesible
Es, sin duda, lo más importante. Los protagonistas en un cuarto de juegos son evidentemente los juguetes, pero si no queremos convertirlo en un trastero, más nos vale que haya espacio suficiente y adecuado para almacenarlo. Los niños tienen que ser capaces de sacar y guardar los juguetes ellos solos, tienen que tener a su alcance las cosas que más les gusten y tienen que tener la posibilidad de estar solos en el cuarto de jugar sin que haya riesgos. En mi opinión, hay que ser cuidadoso con las alturas, escalones, fuentes de calor, ventanas, etc. y tienen que ser muy seguros para que los adultos podamos desarrollar nuestras actividades en el resto de la casa mientras ellos juegan. También me gusta tener en mente la idea de que ellos puedan estar con autonomía en este espacio cuando reciben amigos, sea en la edad que sea. De esta forma aprenden a ser más autosuficientes, y también podemos ir inculcándoles ciertas normas como el cuidado de sus propios elementos, etc.
Diversión multimedia
Esto ya es una opinión muy personal. A mis hijas les gusta ver la tele, evidentemente. Ni más ni menos que a otros niños, pero les gusta (sobre todo a la mayor). Si quiero que estén en la zona de juegos, necesito que también tengan opción de ver dibujos. De esta forma, muchas veces, consigo que se queden jugando porque la tele la tiene allí. Si no, enseguida vienen al salón a pedir dibujos, y como no quiero que el salón sea el armario de los juguetes, al final me encuentro con que no juegan nada. Prefiero que empiecen viendo la tele en el cuarto de jugar, y como enseguida se aburren y ven los juguetes, siempre, siempre, siempre acaban jugando. ¡Eso es lo que yo quiero! Otra de las motivaciones es que cuando tenemos visita, si surge el plan de ver una película, teniendo la televisión en el cuarto de juegos consigo que los adultos tengamos un espacio propio para conversar.
Eso sí, la idea que no me gusta nada es la de la televisión en el dormitorio infantil. Esa es otra de mis motivaciones a la hora de crearles un cuarto de juegos aparte.
Luz natural
Muy importante. Si es donde más tiempo queremos que pasen mientras están en casa es importante que sea un espacio luminoso y vital. No podemos pretender que el espacio de juegos sea un agujero. Necesitan sentirse cómodos y con espacio suficiente, que no tengan que encender la luz artificial cada vez que entran. Muchas personas priorizan el espacio de los niños frente al de los padres, y es algo perfectamente comprensible. Ellos necesitan más espacio porque realizan más actividades en su zona de día que nosotros. Los dormitorios de adultos son zonas de noche y de almacenaje. Pero los de los niños son de diversión, de estudio, de lectura, de vida social, etc. Y creo que debemos considerar que el espacio donde pasan el tiempo de día debe ser equivalente a una sala o salón familiar, en cuanto a distribución e iluminación.
Suelo libre
En mi caso, he tenido que modificar en varias ocasiones la distribución del cuarto de juegos precisamente por falta de suelo libre. Con mi primera distribución, me di cuenta de que muchas veces los juegos de las niñas tendían a salir hacia el pasillo y cada vez que venían otros niños a jugar, se acumulaban todos en la zona de la puerta. Es importante que exista un espacio diáfano suficiente para que puedan sentarse y sacar todos los juguetes. Además, ya sabemos que cuando hay más de un niño, cada uno juega a una cosa y durante un espacio de tiempo ¡muy breve! Enseguida, sacan otro juguete sin guardar el anterior.
En otro post, os mostraré la nueva distribución del cuarto de jugar de casa y cómo he intentado dar respuesta a estas necesidades que he ido descubriendo. Vosotros, ¿tenéis zona de juegos para vuestros hijos?
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