El brunch (un acrónimo a partir de la unión de breakfast (desayuno) y lunch (almuerzo) consiste en una comida que combina desayuno y el almuerzo. Se suele servir, en un período de tiempo que va desde las 10 hasta las 17 horas.
Algunos lo definen como un desayuno tardío o una comida temprana. Su primera aparición fue a finales de 1800 en Inglaterra y parece que nació entre la clase alta británica.
Los domingos muchas de estas familias solían dar el día libre a los sirvientes, quienes, por la mañana, preparaban un bufé que incluían platos de desayuno y de comida, y del cual sus jefes pudieran servirse a lo largo del día.
Para mi, que el desayuno es mi comida preferida del día, la idea de disfrutar de un brunch relajado el fin de semana, es uno de los mejores planes.
En Madrid se puede disfrutar de un brunch en casi todos las cafeterías, este año tengo ganas de conocer varios sitios que tengo apuntados, ya os iré contando.
Disfrutar de un brunch en casa
Reunir a los amigos en casa para disfrutar de un brunch, es una manera de disfrutar desde buena mañana de una jornada en casa. El brunch es una buena opción ya que no requiere mucha complicación a la hora de preparar recetas.
Cocina y prepara cosas sencillas que te permitan disfrutar de tus invitados y tener todo lo necesario encima de la mesa.
Preparar la mesa, Normalmente, los brunchs se toman de pie, a modo de cóctel, por lo que lo mejor es colocar una mesa en con todo lo necesario y que cada cual se sirva lo que le apetezca.
Huye de las mesas recargadas y apuesta por una decoración minimalista, con toques DIY y adaptada a cada ocasión. Sustituye por botes de cristal las tradicionales copas o vasos, en lugar de flores, bodegones con frutas y verduras de temporada etc.
Las bebidas. En cualquier brunch que se precie no pueden faltar el café recién hecho, batidos, leches vegetales,tés y zumos, como tampoco pueden faltar los vinos, el champán y la cerveza. Y, como broche final unos cócteles
Que no puede faltar. Hay materias primas que no pueden faltar en cualquier brunch. La primera de ellas es el huevo, especialmente en su versión benedictine, fritos o a la plancha y acompañados de bacon o salmón, tostadas, tomate, bizcochos, mantequilla, mermeladas etc.
El pan. Disponer de gran variedad de panes jugará a tu favor y sumará puntos para conseguir que tu brunch sea una cita 10.
Por último… ¡la fruta!. En todas sus versiones: sólida, líquida, con o sin acompañamiento, en ensalada o en los tan de moda smoothies. Apuesta, siempre, por las de temporada y, si puedes, por las ecológicas.
Fuente: este post proviene de La Chimenea de las Hadas, donde puedes consultar el contenido original.
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