En una época del año, en la que las horas de luz, van disminuyendo, es cierto que no solo nos gusta vestir de oscuro, y que porque no, en nuestra casa no le vamos a apagar el color.
Por eso disponer de zonas divertidas, coloreadas y con gracia harán disfrutar de nuestra decoración los 365 días.
Pocos detalles, y cosas sencillas como una guirnalda (nada fijo, y que podemos cambiar) o unos cojines que apuesten por un rincón mas cómodo y acogedor, serán la clave para pasar de un espacio aburrido y soso, a un lugar de color y alegría.
Hoy os traigo un rincón realmente inspirador, por su luz y su mezcla, en el que se dan lugar piezas como Tollix, o Eames, en torno a una mesa de comedor rodeada de detalles naturales, nórdicos y vintage.
El color no entiende de tendencias, es cuestión de saberlo combinar.
via
Follow me on:
Twitter ··· Facebook ··· Bloglovin
By Carolina