¿Te has preguntado alguna vez cómo serán las cocinas del futuro? Yo no lo había hecho hasta ahora. Pero parándome a pensar y echando la vista atrás me he dado cuenta de que han sido muchos los cambios que se han producido en el ámbito de la cocina y de la alimentación en los últimos, y no tan últimos, años. Y esto me lleva a preguntarme, ahora sí, qué sorpresas nos traerá el futuro. #alrededordelamesa
¿Y por qué me planteo justo en estos momentos semejantes cuestiones? Pues porque resulta que Ikea ha realizado un, supongo que sesudo, estudio analizando macrotendencias mundiales y tendencias en el ámbito de la alimentación. Y han llegado a una conclusión que se traduce en 4 estilos de cocinas del futuro, con un concepto común: Fomentar una vida sana y sostenible en el hogar. Suena bien. Parece que vamos por el buen camino.
Las cocinas del futuro según Ikea
#1: Educar es sembrar
La primera tendencia es la de la autoproducción y autocultivo en el hogar. Una ventaja hasta ahora en la que la exclusividad ha correspondido al ámbito rural.
La propuesta es crear tu propio huerto urbano dentro de casa. Una tendencia que de hecho ya ha comenzado a materializarse. Habrá que ver si perdura en el tiempo o se queda en moda pasajera.
Estamos hablando de un futuro con una forma de vida más sostenible y saludable. Y también sobre compartir este estilo de vida con los demás, formando a pequeños y mayores sobre cocina sana.
La zona más crítica de mi cerebro ve un problema a estos buenos pronósticos. El tamaño de las viviendas es cada vez menor, como lo es el tiempo libre. El futuro pasaría pues, por un cambio del concepto vivienda.
Sobre esto precisamente trata la segunda tendencia en cocinas del futuro.
#2: La Cocina de la comunidad
Hablamos de compartir un espacio de cocina y almacenaje con nuestros vecinos. Hace ya algunos años que surgieron en EEUU y Canadá las primeras cocinas comunitarias. Lo hicieron en forma de espacios dónde intercambiar conocimientos gastronómicos.
En el futuro, estas cocinas comunes supondrían una optimización de recursos a la hora de cocinar, además de solucionar el problema de almacenamiento y de residuos de cada piso.
La idea, así como concepto, es buena. Aunque de nuevo el lado crítico de mi cerebro me susurra al oído que necesitamos un cambio bastante profundo de mentalidad. Con el tiempo creo posible que la idea de cocina comunitaria se vea como algo habitual. Con bastante tiempo, eso sí.
Aprovecho el tema para dejarte esta fotografía con lo que podría ser un electrodoméstico comunitario dónde se indican las temperaturas a las que deberíamos tener siempre nuestro congelador y frigorífico. A mí siempre se me olvidan.
#3: Todos los colores son bienvenidos a nuestra mesa
Las mesas del futuro pasarían por ser más personales, perdiendo con el paso de los años rigidez. La mezcla no solo de colores, sino de vajillas y cristalerías también es ya un hecho. Hace tiempo que el estilo ecléctico viene imponiéndose en las mesas más bonitas.
También es verdad que esto es un sí pero no. Mezclar platos, cristalerías y mantelerías es una buena idea…si mantienes algún tipo de coherencia en la combinación. No puedes olvidar de que el riesgo de que la mesa parezca vestida con restos está ahí.
¿Qué me dice sobre esto el lado cansino de mi cerebro? Que sí, que lo veo. Pero que las tendencias van y vienen. Las modas vuelven renovadas. Pudiera ser que con el paso de los años se produzca un retorno a las mesas vestidas del modo formal y protocolario de la Inglaterra del siglo XIX. Por ejemplo.
#4: Yo y mis táperes
Imágenes Ikea
Termino el recorrido con una cocina del futuro portátil y funcional. Diseñada para espacios reducidos, cuenta incluso con los elementos necesarios para el reciclaje. Pequeña y sostenible. ¿Serán así las cocinas del futuro?
Me encantaría saber qué opinas de estas futuras tendencias y a cuál de las 4 le ves, valga la redundancia, más futuro.
¡Hasta el viernes!
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