La dificultad para guardarlos de forma ordenada radica en que hay mucha variedad de tamaños y los usamos con mucha frecuencia. Sinceramente yo no los tengo perfectamente ordenados, pero sí tengo un sistema que me permite guardarlos y sacarlos de forma cómoda y creo que esto es lo importante; si además tienes tiempo para tenerlos ordenados por tamaños pues mejor.
La regla principal que utilizo es separar las tapas de los recipientes y si tienes espacio para ello ponerlos en cajones, las tapas en uno y los recipientes en otro. Si no utiliza cestas o bandejas de plástico y ponlas dentro de un armario que esté a una altura accesible. Es recomendable que sean alargadas y con un mínimo de entre 10 centímetros y un máximo de 15 de profundidad, así puedes con un vistazo saber lo que hay.
Si no eres una persona ordenada, o no tienes tiempo para ordenarlos, esta forma de guardarlos te resultará práctica sin tener que preocuparte demasiado de su orden, porque lo importante es que es más fácil mantener el orden al separar tapas y recipientes, y que estén ubicados de forma accesible.
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