La clave para tener una casa al día sin excesivos quebraderos de cabeza y a un precio razonable radica en el mantenimiento. Es decir, acometer pequeños cambios cuando es necesario para no encontrarnos un día con el problema de que la casa se nos cae encima.
El objetivo de este post no es otro que el de ayudar a todos aquellos que quieren cambiar el aspecto de su hogar pero disponen de un presupuesto limitado. Por fortuna, hoy en día existen infinidad de opciones para dar un aire nuevo a nuestra casa sin arruinarnos y, además, si somos un poco mañosos, podemos hacerlo nosotros mismos.
Cocinas y baños son dos de las estancias de la casa que más se reforman, y ello es por el lógico desgaste diario que sufren.
Una magnífica opción para renovar las paredes es evitar el engorro de retirar los alicatados existentes y optar por pintar los azulejos. Sí, tenemos pinturas fantásticas y de gran calidad en el mercado específicas para pintar los azulejos. Se trata de esmaltes sintéticos con gran resistencia a roces y manchas, que los hacen perfectos para cocinas y baños, además con una enorme variedad de colores.
A la hora de cambiar suelos, otra de las reformas que más se acometen en una casa, tenemos una buena opción en los laminados y vinílicos, muy cálidos y que imitan infinidad de materiales, tales como la madera, la cerámica, el mármol o los suelos hidráulicos, y lo más interesante, se colocan encima de los existentes, sin necesidad de obras. Y si no veamos estos ejemplos.
Opciones de suelos laminados.
Opciones de suelos de vinilo.
Renovar la pintura de paredes es una gran opción para cambiar el aspecto de nuestra casa. Pero si queremos darle un aire totalmente nuevo el papel pintado es un gran aliado. No es necesario empapelar todas las paredes de una habitación, a veces es suficiente con darle protagonismo a una pared y pintar el resto de la estancia con tonos que combinen con el papel escogido.
Otra opción para las paredes son los revestimientos de madera o DM, por ejemplo colocando un zócalo a media altura protegemos las paredes de roces y golpes, sobre todo si tenemos niños pequeños en casa.
Por supuesto, hay muchísimas más reformas que podemos acometer en casa, pero con estos cambios fáciles y económicos, nuestra casa lucirá como nueva.
Fuente: este post proviene de DecoShabby, donde puedes consultar el contenido original.
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