Todo empezó con una invitación, una pregunta, un juego... Has recorrido tantas veces los pasillos de Ikea que podrías hacerlo con los ojos cerrados ¿Te gustaría probarlo? ¡Y a nosotros nos encanta jugar! ¡Nos apuntamos! ¡Y super felices!
Al llegar nos recibieron con un piscolabis y todo el cariño del mundo, y una vez hechas las presentaciones, nos taparon los ojos por equipos. Estaba convencida de poder moverme sin problema por esos pasillos que tantas veces hemos recorrido en familia, pero señores... ¡Ikea ha transformado la entrada de sus tiendas, y a pesar de exprimir el resto de los sentidos, las cosas se perciben de otra manera diferente...! ¿De eso se trataba no? ¡Empieza el viaje sensorial! ouh yeah!
Primera parada: Mi pequeño huerto
¡Equipo azul! Eup! Así, Monika de Viajando con mami, David de La Ruta y yo, nos pusimos en fila al más puro estilo eskolako trena (tren del cole) acompañados de nuestra lazarilla Nagore que con mucha paciencia nos fue guiando hasta la primera parada.
Primeras sensaciones... Aromas agradables... ¡Olfato! Se trata de descubrir las plantas aromáticas que nos van acercando... Cebollino, romero, hierbabuena y perejil...
...en un espacio que a mi personalmente no puede gustarme más... ¡Y es que ya sabéis lo que nos gusta el campo, la naturaleza, pasar largas tardes en el huerto, etc.!
Este primer nuevo espacio es un lugar en el que aprender de la naturaleza sembrando y plantando nuestros propios alimentos, es un lugar en el que mostrar a nuestros hijos la necesidad de cuidar de nuestro planeta reciclando envases, tapones, vidrios ¡Y lo que haga falta! y de ayudarles a descubrir que incluso la basura puede ser aprovechada haciendo compost.
Segunda parada: 1,2,3 Cocina otra vez
Esta vez nos toca agudizar el sentido del tacto empezando por descubrir tres texturas diferentes: almendra molida, huevo batido y harina; y continuar haciendo galletas.¡Con los ojos tapados, si, seguimos con cuatro sentidos! ;) ¡Y lo que nos gusta! jajaja!
No hay mayor placer que hacer unas galletas en familia y luego comerlas juntos untadas en un buen tazón de leche ;) ¡Mmmmm! ¡Todo lo hecho en casa sabe mejor! ¿Os acordáis de las galletas de mantequilla que hicimos con moldes de plastilina?
Eso es lo que representa precisamente este segundo espacio, una gran cocina para toda la familia, para vivir la gastronomía, y descubrir junto a los más pequeños nuevas recetas, texturas, o sabores... ¿Toda la familia con las manos en la masa? ¡Por supuesto! Por eso, la encimera que Ikea ha diseñado para los niños de la casa no puede gustarme más ¡Ellos también quieren recetear cómodos, y tener una encimera a su altura es lo más! ¿No os parece?
Tercera parada: El rincón del chef
Seguimos nuestro viaje sensitivo a través del gusto y de los nuevos sabores que descubrimos a ciegas: salmón ahumado (¡que no está rico, sino riquísimo!), albóndigas de verduras, y chocolate 70% de cacao ¡Y que viva este chef! ;)
Todo ello, en una cocina de última generación ¡a la que no le falta detalle! especial para los amantes de la cocina. Isla central movible, horno para cocinar al vapor, compartimentos de almacenaje maravillosos con luz integrada, o 1000 utensilios diferentes, son sólo una pequeña muestra de los artículos que equipan este espacio de ensueño ¡Quien tuviera una cocina así! ¡Y quien tuviera una casa más grande para poder tenerla! jajaja!
Cuarta parada: Del árbol a tu mesa
¡Música! En este espacio creamos un ritmo usando cucharas y tenedores de madera, improvisadas maracas handmade con táperes y pequeñas piedras... ¡Y yo me sonrío a mi misma recordando a mi princesa y a mi pequeño explorador, y su pasión por la música y la percusión! ¡Esto suena bien! ;) ¿Qué os parecería fabricar nuestros propios instrumentos con los peques? ¡Esto hay que hacerlo DEFdecorer@s!
Nuevas sensaciones en un espacio que me transporta a mi más tierna infancia, cuando mi amama trituraba los tomates de la huerta y los embotaba en la vieja cocina del caserío; o cuando todos juntos asábamos y pelábamos los pimientos rojos en la chimenea... Tradiciones que aún hoy vivo con mis padres, y que también espero poder compartir con mis hijos.
Quinta parada: El baile de los platos
Y llegamos a la última parada de este viaje a través, ahora sí, de la vista... Primero virtualmente, y luego con nuestros propios ojos...
Ahora toca el turno de verlo todo con los 5 sentidos, descubrir cada espacio, disfrutar de la buena compañía, y compartir momentos #AlrededorDeLaMesa. ¡Una mesa llena de productos ricos de la tienda sueca!
Un besazo enorme a Laura de Because, a Monika de Viajando con mami, a David de La Ruta, a Jaione de Más allá del rosa o azul, a Elena de Cityshopping, y a Gessami de Madre primeriza;
y otro muy especial a todo el equipo de IKEA Barakaldo por vuestro cariño, por todos los detalles que preparasteis para recibirnos... y en definitiva, por hacernos sentir como en casa. ¡muack!
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