La realizamos a medida y por encargo del cliente, que acababa de reformar una torre y quería aprovechar un hueco muerto existente entre columnas en la estancia de la cocina comedor.
En el taller disponíamos de unos porticones viejos con unas medidas que podían encajar si conseguíamos construir un cuerpo de armario a medida del hueco y que éstas, una vez restauradas, hicieran la vez de puertas.
Así pues procedimos a hacer una estructura a medida con madera de palets y provista de tres estantes. El siguiente paso fue acondicionar la madera de los porticones, puliéndolos, conservando los herrajes originales y dejando todos los elementos con un aspecto lo más natural posible.
No quisimos aplicarle ninguna pátina ni acabado puesto que queríamos que tuviese un aire un tanto decadente y rústico, y el efecto de la madera tal como quedó después de pulir, nos gustó a todos.
A continuación pusimos la malla conejera de alambre en los huecos de los ventanales y ya solo nos quedaba el ensamblaje con el chasis, para lo que acoplamos unas bisagras vistas para la apertura y cierre del armario.
Así es como quedó. Pusimos encima un par de damajuanas forradas en mimbre antiguo y lo atrezzamos con unas pequeñas luminarias y unas blondas en ganchillo blanco.
¿Qué os parece?
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Si tenéis algún espacio muerto o algún hueco al que no sacáis partido, pensad que siempre se puede encontrar alguna solución no solo decorativa, sino funcional. Podemos ayudaros, no dudéis en contactar conmigo a través del formulario de contacto para cualquier consulta que tengáis.
Besos
G
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