Cómo ahorrar con tu lavavajillas




Ahorrar con tu lavavijllas, a veces resulta un tanto complicado. Y por ende,  probablemente, necesiten de algunos tips prácticos para llevar a cabo este ahorro de una forma cerebral y con resultados positivos. ¿Por dónde empezar? Vamos a ponernos en situación. En nuestro día a día, algunos de nosotros preferimos fregar 'los 4 platos o vasos' que yacen en el fregadero por pereza de tener que poner y quitar el lavavajillas.



Generalmente, detrás de ello se esconde el famoso mito de que el lavaplatos implica irremediablemente el despilfarro de agua y electricidad. ¡Falso! Todo depende del uso y el enfoque que se le dé a este acto que debería quitarnos trabajo y esfuerzo de encima de forma eficiente. Por eso, hoy queremos hacer hincapié en cómo podemos ahorrar utilizando este electrodoméstico, ¡porque claro que se puede!

Todo depende del uso y cuidado que le demos

Como les decíamos, un lavavajillas utilizado de una forma correcta implica que estamos siendo amigables con el medio ambiente. Para ello, debemos intentar hacer todo esto...

- Intenta llenar el lavavajillas en su totalidad. Si funciona a máxima capacidad, estaremos consumiendo menos energía y agua que si lo llenásemos a la mitad. ¡Piénsalo!

- Antes de encenderlo, trata de limpiar o enjuagar el interior del lavaplatos, así como los utensilios que introduzcas en el mismo. No se trata de dejarlos como nuevos, pero sí de ahorrar energía y agua haciendo el proceso más llevadero (cuantos menos residuos, mejor).



- No hagas varios lavados en un día. Es mejor esperar y hacer uno solo.

- Lee, lee y relee. Aunque no te apetezca demasiado, ¿sabes que leerse bien las instrucciones de cualquier electrodoméstico, no sólo del lavavajillas, es vital para hacer un buen uso de él y, por lo tanto, darle una utilidad sostenible?

- Instala un lavavajillas de clase A como mínimo, también llamado verde. En el etiquetado, además, podrás confirmar que se trata de un electrodoméstico eficiente.

- Cuando retires los platos de la mesa, te recomendamos algo muy sencillo pero que evita muchos problemas: retirar con un pequeño papel todos los restos de cada elemento de menaje, de tal forma que la suciedad se haya reducido considerablemente antes de meterlos en el lavavajillas.



- No lo abras nada más terminar el proceso de lavado y secado de vajilla. Es un error muy típico que implica que se produzca una condensación del vapor. En su lugar, espera media hora.

- Infórmate de los limpia máquinas para 'alargar' la vida de tu lavaplatos. ¡Merece la pena!

- Utiliza el programa más adecuado para el tipo de suciedad y carga de cada lavado.

-¿Crees que el detergente no influye en el ahorro? Te equivocas. No escatimes en un buen detergente, ya que puede ser determinante a largo plazo.

Como ves, son algunos tips exprés para ponértelo más fácil de cara al ahorro en tu hogar este verano; ¡no dejes de ponerlos en práctica! Por si acaso, compartimos algunas ideas más sobre el uso responsable del lavavajillas.

¡Nos vemos en el próximo capítulo!

 
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