Sí lo sé, mi obsesión por el rosa (siempre rosa empolvado o rosa pastel, aquí, aquí y aquí) empieza a ser obsesiva pero sinceramente no me importa. Sobre todo si me encuentro con viviendas de este tipo, sencilla, limpia, con el hormigón visto por doquier y la espectacular combinación cromática de rosa empolvado, blanco y gris. En serio, alguien le ve pegas a esta casa? La quiero para mí.
vía: archdaily