Han sido más de 150 entradas y el blog solito ha ido tirando por donde le ha parecido. Hace casi dos años que empecé a hacer entradas regulares, a centrarme y ¡a conocer gente maja!
El blogging era algo totalmente nuevo y me lo paso como una enana gracias a vosotras, que estáis ahí. Veo en cada nueva pulblicación, que el blog va creciendo, que cada vez somos más y esto se nos queda pequeño. ¡Muchas gracias por eso! Disfruto con cada comentario y con las que no decís nada, pero estáis ahí, así que espero no dejarme a nadie por el camino.
Dicen los que saben, que el verano es un buen momento para estas cosillas. Llevo un mes enterándome de cómo mudar todo el tinglado. He hecho lo que he podido con los medios de los que dispongo. Léase, que a falta de monedas para contratar un pro, una tiene que buscarse las habichuelas. Muy DIY todo. Ya sabéis, hecho a mano y con amor.
Como ya soy muy pro he puesto una redirección y aterrizareis por el nuevo sin más. He mudado contenido, comentarios y lo que he podido, por lo que seguramente lo veréis todo más o menos igual. Mucho trabajo “interno” pero – por ahora – mantengo la estética, que tampoco es cuestión de marear ¿no? Si veis cualquier cosa rara ¡avisadme!
Además también he mudado a las seguidoras que he podido de blogloving y wordpress y voy a comenzar a escribir una newsletter con un resumen (probablemente semanal) a partir de septiembre. Si te apetece apuntarte te dejo el link: eepurl.com/bwwhHX
Y mi nueva dirección (con un orgulloso .com) IamaMessBlog.com ea! Está hecho.
¡Bye bye wordpress.com! Al final me voy a poner sentimental y todo…
Fuente: este post proviene de I am a Mess, donde puedes consultar el contenido original.
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