El taller donde trabajaba antes mi padre en la tapicería, era un local super alto que estaba en el centro de Sevilla y para aprovechar la altura que tenía, tenía hecho un altillo que ocupaba toda la superficie del taller y todo lo de arriba era un segundo local. Una época fue la zona de las costureras, otras la zona de planchado pero en su mayoría, el altillo fue el almacén de la tapicería. Recuerdo ese taller con mucho cariño porque ya por entonces me imaginaba yo como sería hacerme una casa en ese altillo y en ese taller. Allá por aquella época no sabía yo muy bien que me iba a gustar tanto la tapicería, que me dedicaría a ella ni jamás que tendría esta pasión por la decoración, pero ya por entonces se fraguaba en mi idea que vivir en un loft con los espacios abiertos tenía que ser genial.
Entre este deseo mio de acabar en un loft de techos altos y que no paro de traeros lofts donde la cama se sitúa en un altillo, no puedo dejar pasar el momento y enseñaros unos pocos de altillos donde sería ideal poder dormir cada noche. Además, creo que un altillo cuenta con muchas ventajas, como pueden ser:
No hace falta hacer la cama (esto para los más flojos). Sé que es una ventaja super floja pero todos sabemos que hacer la cama cada día muchas veces da mucha pereza, teniendo la cama en un altillo el día que no la hagamos, por lo menos no tenemos la habitación hecha unos zorros, la cama estará ahí arriba y nadie la verá.
Es un espacio muy íntimo. Será que he dormido toda mi vida con mi hermano en una litera y yo dormía en la parte de abajo, pero a mi el tener el techo más cerca y sentirme en un espacio más pequeño para dormir me aporta mucha intimidad, me siento mejor durmiendo en un habitáculo más pequeño. Así que un altillo, no puede ser mejor idea para mi.
Ganas espacio. Al elevar la cama a un altillo ganas todo el espacio de debajo de la cama para otras cosas. Por ejemplo, en el post del Martes el altillo de la cama tiene debajo el vestidor y el baño. Así, pueden usar ese espacio para muchas otras cosas como un despacho, el baño, una librería o un gran armario.
Puedes limitar mejor la luz para descansar. Para dormir bien hay que dormir con oscuridad. Muchos de nosotros estamos levantados antes de que amanezca pero también existen los Domingos, así que para el día que quieras descansar más de lo normal, no hace falta que el sol te de los buenos días y te saque de la cama. En un altillo, al estar más elevado y tener un habitáculo más pequeño, la luz entra con más dificultad y si la fuente de luz es más directa, con poner unas cortinas bien tupidas por donde entra la luz y ya tenemos un Domingo con despertar feliz en nuestro altillo. ¿No creen que son suficientes estos motivos para plantearse tener un altillo? Os dejo unos cuentos de altillos para que vean lo chulos que quedan e imaginen como tiene que ser despertar cada día en uno de esos.
Obviamente los altillos tienen sus inconvenientes, como puede ser el tener que subir y bajar las escaleras para ir al baño en mitad de la noche. Eso es algo que hay que tener en cuenta dependiendo de como seáis cada uno de ustedes. También es un inconveniente la altura de la casa. Obviamente este tipo de altillo sólo lo pueden tener los suertudos que tienen casas de techos altos pero como habéis podido ver, no hace falta tener un loft de ensueño para poder contar con un altillo bonito. De hecho, es una solución super buena para los pequeños apartamentos que tienen los techos altos como os he enseñado alguna que otra vez.
Espero que os haya gustado el post de hoy y coincidan conmigo en que dormir en un altillo tiene que ser muy chulo además de aportar unas soluciones en nuestra casa que son muy a tener en cuenta. Que pasen un feliz Jueves.
PD: si dormís cada día en un altillo no dudéis en mandarnos las fotos ¿eh?
Fuente: todas las imágenes han sido tomadas de distintos tableros de Pinterest
Fuente: este post proviene de Cositas Decorativas, donde puedes consultar el contenido original.
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