¡Buenos días!
El mármol es una piedra caliza utilizada desde la época de los griegos y los romanos. Con ella podemos realizar pavimentos, revestimientos y complementos como lavabos, encimeras, mobiliario….Desde luego si tuviese que hacer una selección de mis materiales preferidos, el mármol estaría incluido entre ellos. Me encantan los pavimentos realizados con este material, sobretodo cuando se trata de piezas de gran formato, revestir un baño, las mesas de mármol….
Colores hay muchos: blanco, rosa, crema, negro, verde, rojo, marrón, gris, etc. Entre mis favoritos, el blanco Macael (como su nombre indica procede de Macael, Almería) el Carrara o el Arabescato.
En el post de hoy me centro en un espacio donde me gusta utilizarlo especialmente: la cocina.
El mármol es un material que funciona muy bien, y se adapta a todos los estilos de cocina, desde las más rústicas a las minimalistas. Combina tanto con colores claros como con colores oscuros y la mezcla de este material con la madera queda muy elegante.
En un espacio como la cocina, se puede utilizar en una encimera o para revestir una isla. Incluso podemos realizar el seno en el mismo material.
Como con cualquier piedra natural, debemos tener en cuenta una serie de cosas para que envejezca correctamente. Deberemos tener precaución con el limón y el vinagre ya que son corrosivos. Para su limpieza, lo mejor, un trapo húmedo con jabón neutro.
¡Os dejo con unas imágenes!
Fuente: este post proviene de Diseño & Co, donde puedes consultar el contenido original.
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