Lo primero que hicimos fue elegir una temática divertida que además, permitiese disfrazarnos, y como los clásicos nunca fallan, nos decidimos por el lejano Oeste, con sus Indios y Vaqueros. Diseñamos una invitación para enviar por correo, y elegimos los colores, tonos suaves en azul turquesa, amarillo y rosa palo. A partir de aquí…imaginación al poder!
Una decoración muy sutil, con una mesa vaquera para los bocados salados y una mesa india dulce, con pequeños detalles como las guirnaldas, los cubos de zinc o las cajas de madera, que se completaban con un rincón para el photocall, con una cámara instantánea, un libro de firmas donde pegar las fotos y poner una frase especial de recuerdo y un poco de atrezzo para hacerlo más divertido.
Por último, un detalle para los invitados más pequeños…una lámina con tres tipis indios en los tonos elegidos, y el nombre de cada uno de ellos…les encantaron!
En cuanto a la comida, un poco de todo, una merienda-cena con cafés, batidos y limonadas, y desde perritos, hamburguesas y sándwiches hasta brownies, yogures y cookies. La tarta arcoíris decorada con indios y vaqueros de Playmobil fue la sensación!
Os dejo con las fotos, que realizó nuestro fotógrafo de cabecera, Uli, que además realizó un reportaje precioso con los papás y que supo captar momentos mágicos durante el evento. Espero que os guste tanto como a nosotros organizarlo y vivirlo. Un placer!
Fuente: este post proviene de Diseñando a Rose, donde puedes consultar el contenido original.
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