La cocina no es una de las habitaciones favoritas de la casa. Creo, que el principal motivo de que no me atraigan, es porque no me gusta cocinar. En su lugar, prefiero leer un libro en el salón, hacer un DIY en mi tallercito o trabajar en mi estudio.
Sin embargo, tengo clara una cosa, mi cocina no me gusta. Cuando la puse, el rústico dominaba la tendencia decorativa, es oscura, demasiados muebles... la antítesis de lo que ahora es para mí una cocina perfecta.
Mi cocina perfecta ahora mismo, sería la que os traigo en este post:
1 → Mobiliario en blanco, mezclado con acero
2 → Sin armarios superiores
3 → Zona de comedor luminosa
4 → Estanterías auxiliares que me permitan decorar con piezas originales
5 → Imprescindible una pequeña despensa
6 → Paredes originales, en este caso el ladrillo desde luego, lo es.
Permitidme decir que sólo le faltaría algo:
7→ El suelo hidráulico, pero se lo perdonamos, porque este suelo de madera antiguo también es precioso.
¿Ideal verdad?. También os digo, todo esto, no garantizaría que yo me pusiera a cocinar, je, je.
Vía Entrance
Más inspiración sobre cocinas: una cocina abierta al salón y redecorando la cocina.