Dicen que quien tiene un amigo tiene un tesoro y yo no puedo estar más de acuerdo con esta afirmación. Me siento muy afortunada, a la par que presumo de pertenecer a una pandilla enorme. La mayoría nos conocemos desde pequeños y otros han ido llegando con el tiempo, incluso los que vinieron después, son como parte de mi familia. Quizás os preguntáis a qué viene todo este rollo, es simplemente para explicar que me voy de nuevo a celebrar otro 40 cumpleaños sorpresa de una buena amiga, debéis pensar que ando todo el día de celebraciones, pero es lo que tiene ser tantos en un mismo grupo. Es más, dentro de dos semanas tenemos otra celebración de cumpleaños y en esa ocasión celebran seis a la vez, entre ellos mi marido, ¡qué Dios nos pille confesados!
De ahí el post de hoy, me apetecía buscar inspiración con los colores que inundarán mi retina durante el fin de semana, azul y verde. No diré dónde voy porque la homenajeada lee mi blog, ella sólo sabe que va a la playa, nada más, el destino os lo contaré el lunes.
Antaño pensaba que estas dos tonalidades eran difíciles de mezclar, sin embargo no pueden quedar mejor juntas. Al ser colores fríos, probad a añadir algún toque cálido (como el de la madera), el resultado será de diez.
Os dejo con mucha inspiración, porque aquí mi maleta y yo nos vamos a Atocha rumbo a la playa…
¡¡Feliz fin de semana!!
Imagenes vía Pinterest
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