Paa mí eso es exactamente lo que se consigue empapelando , ya sean paredes, muebles, o lo que se te ocurra. Los límites los pones tú y tu imaginación.
A veces el resultado es sorprendente. Hoy quiero enseñaros tres papeles diferentes para diferentes estancias en la misma casa.
Papel arabesco en tonos grises en la pared del recibidor
Quizás no se aprecia bien, pero el papel es precioso. Esos colores verdosos son pequeñas plumitas y todo el fondo del papel tiene texto escrito con trazos de escritura con pluma.
En una pared del salón se ha puesto un papel de rayas de forma horizontal en tonos beige y grises. La textura es una pasada.
Ya veis como empapelando tan solo una pared de cualquier estancia, conseguimos decorarla de una forma tan sencilla.
Trabajo hecho por Jose Antonio y Belen Caballero
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