Aunque más indicado para niñas (no veo yo a un pequeñajo durmiendo entre estas paredes), sería muy monótona toda la habitación en este color.
Por eso lo ideal es combinar los dormitorios color lavanda con tonos algo más oscuros dentro de la misma gama, o alternando con elementos en blanco marfil o en suaves tonos pastel.
Si le añadimos detalles en gris claro a los dormitorios color lavanda, aumentaremos la sensación de un espacio tranquilo y armonioso para el descanso del bebe.
Imágenes publicadas con permiso de .homedit.com