A la vista está lo que ha llamado mi atención de esta casa del barrio londinense de Walthamstow. Sus techos abovedados, a pesar de haber sido fruto de restricciones presupuestarías y una estricta planificación, han resultado convertirse en lo más peculiar y característico de a la misma.
La pequeña casa victoriana ya existente, sufrió una remodelación por la parte del jardín a la que se le adosaron dos extensiones algo inusuales. Como el presupuesto era muy ajustado, se inspiraron en las técnicas de construcción naval utilizando para ello, contrachapado de abedul en el techo creando así, esta forma tan característica como de casco de barco invertido que le aporta visualmente mucha amplitud, y al tener forma curva, ocupa menos espacio (tenían el hándicap de estar muy pegados a las casas colindantes). Para aportar más luz, en la parte más oscura de la cocina (al fondo, donde no hay ventanas) se instalaron tragaluces en los techos, de esta manera la iluminación natural estaría garantizada en toda la estancia.
Y ya que estamos, las curvas no sólo las podemos ver en el techo, otros elementos también las contienen. Como el diseño de la puerta corredera de la cocina, el acabado de las escaleras, piezas de mobiliario y decoración, o la mayoría de ventanas que dan al exterior. Por cierto, el gran ventanal del que disfruta la cocina dispone en su parte interior de un banco, por lo que si la ventana se encuentra tanto abierta como cerrada, pueden sentarte en él y disfrutar de las vistas del jardín.
En cuanto al color, hay dos zonas claramente diferenciadas. En los espacios comunes, predominan los tonos neutros junto a la madera, mientras que las zonas de noche se han enfatizado con tonos más oscuros que aportan calidez y elegancia. El uso del color es una manera muy efectiva de generar carácter e impacto a bajo coste.
El mobiliario me encanta, una sutil mezcla entre un continente moderno y un contenido con aire mid-century. Confieso tener mi pieza favorita, la mesa y las sillas de comedor situadas en la cocina, aunque sin duda de esta casa me quedo con la parte arquitectónica, con el añadido de la cocina y sus techos abovedados en madera contrachapada de abedul. ¿No os resulta súper original?
Imágenes: Roar Architects