El post de hoy me confirma que lo que a veces, a primera vista, debería ser feo y caótico, puede llegar a ser algo muy bonito. Una de las cosas que destaca de este piso son las vigas, las paredes ligeramente abuhardilladas y los techos algo inclinados que han pintado de blanco para dar más sensación de amplitud, luminosidad y disimular todas estas "imperfecciones".
La mezcla de téxtiles en tonos claros, aprovechar los espacios y las columnas para poner estanterías y usarlas de separadores y la pared de pizarra en la cocina hacen de este pequeño piso un bonito y acogedor hogar.
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¿Qué te parece la decoración?
¿Te gustan tanto como a mi las bigas?
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