Yo creo que siempre han estado de moda. Las paredes de ladrillo visto para decorar interiores son uno de los recursos que más juego ofrecen por la cantidad de acabados disponibles y por la posibilidad de combinarlo con otros materiales.
Las paredes de ladrillo visto siempre me recuerdan a los lofts neoyorkinos. Si lo que queremos es darle un aire más industrial a nuestra casa, las paredes de ladrillo son perfectas, pero encajan muy bien con otros estilos más rústicos, vintage y, por supuesto, una pared de ladrillo visto en color blanco está de plena actualidad y le va muy bien a ambientes más modernos.
El ladrillo es un material muy aislante por lo que si colocamos una pared de este material en cualquier estancia de nuestra casa va a cumplir un doble papel. Sin embargo, existen en el mercado otras opciones que imitan perfectamente el ladrillo y son muy resistentes y fáciles de colocar si no somos manitas consumados. Se trata de unos paneles fabricados en resina y fibra de vidrio, que se realizan en múltiples acabados y sirven tanto para exterior como para interior.