Serenidad y delicadeza es lo que necesito hoy (hablo como Cèlia), porque esto de emprender tiene subidas y bajadas... Me habían hablado de ellas, yo había pensado que a mí no me pasaría: hace años que sueño con esto, pero sí que pasa... Las bajadas son directamente proporcionales a la intensidad de las subidas, y con la pasión e ilusión que le ponemos nosotros, os podéis imaginar la caída en picado... Para sanar las heridas que provocan los temores y las dudas, nada mejor que empezar de cero, como este proyecto, en el que una casa renace de sus cenizas, casi sin esperanzas, pero con mucho respeto, mimo y paciencia... Y me reconforta pensar que esos son los ingredientes que no pueden fallar ni aquí ni en Antic&Chic, así que vamos a seguir caminando, cogidos de la mano, porque tengo la inmensa suerte de tener al mejor compañero de viaje...
Un maravilloso proyecto de La Buhardi - Arquitectos y diseñadores gráficos