¡Me he venido arriba! De modo que al hilo de comentar contigo los clásicos que en esta estación no puede faltar, hoy quiero hablarte de las meriendas de verano. Esas que se organizan en un plis plas justo a la salida de un fresco baño o tras una placentera siesta. De las que saben a helado, a fruta y a zumito refrescante.
Y en torno a este fresco e irresistible panorama, quiero darte unos cuantos tips decorativos para lograr que todas y cada una de tus meriendas de verano se convierta en irresistible y la mar de alegre. ¿Te animas a ponerlos en práctica?
Fuente: The cool life
Busca una zona fresca
A la hora de preparar tus meriendas de verano siempre será bienvenida la idea de instalarte en una zona fresca y dotada de sombra al abrigo de vegetación, en un porche, bajo una pérgola, toldo o alguna sombrilla. Y es que si algo conseguirás bajo estos lugares será crear ambientes en el exterior con un grado que confort que fomentará que la merienda se prolongue en el tiempo.
Fuente: Home bunch
Fuente: Lisa Cohen
Cuenta con una cálida mesa
Dependiendo de tus preferencias, será casi indispensable que cuentes con una mesa en torno a la que os podáis sentar. Ya sea una mesa tipo comedor o más bajita tipo mesa de centro, si está formada por materiales naturales como madera o fibras naturales la calidez en el ambiente estará más que servida.
Fuente: Chic decò
Fuente: Laure Joliet
¡Vístela con un mantel bien alegre!
Y es que puede que resulte de los detalles que más llame la atención y más vida y color aporte al ambiente. Anímate a emplear colores vivos, estampados florales, botánicos o tropicales y verás que estupendo cambio experimenta la decoración de tus meriendas de verano.
Fuente: Maxi Tendance
Fuente: Apartment Therapy
Flores que no falten
Si tu jardín, patio o terraza cuenta con ellas, no dudes en dar un toque colorido y aromático a tu mesa contando con su bella presencia. Improvisa un original jarrón con algún elemento decorativo, tarro de cristal, lata o accesorio de menaje y luce tus flores en la mesa.
Fuente: Create find admire
Fuente: Simple splendid things
Crea un ambiente cálido y confortable
Puede que tengas la suerte de contar con un entorno que por sí sólo genere un ambiente la mar de cálido y confortable, pero si no es así, prueba a incorporar algún elemento textil, da cabida a mobiliario más cómodo e introduce materiales y elementos naturales en el ambiente. Verás cómo cambia la calidez de tus meriendas de verano.
Fuente: Architecture art design
Fuente: The gardeners eden
¡Que sea colorido!
Un verano sin color es menos verano. Así que anímate a rodearte de vivos y alegres colores con los que no te has atrevido durante el resto del año y convierte tus meriendas de verano en toda una expresión de luz y alegría. En paredes, mobiliario o a través de los propios elementos textiles el colorido será siempre bienvenido.
Fuente: Turbulences déco
Fuente: Dust Jacket
Debe resultar cómodo
Y es que si algo bueno tiene el verano es que nos permite disfrutar de largos y distendidos ratos a la intemperie disfrutando de una animada y relajada tertulia en compañía de los nuestros, y claro, para ello vamos a necesitar contar con mobiliario medianamente cómodo.
Fuente: Dust Jacket
Fuente: Vuurkorf winkel
De modo que ya sabes, lograr que tus meriendas de verano resulten la mar de irresistibles puede ser cuestión de pequeños detalles que harán de esta reunión una alegre y fresca idea para compartir un ratito en familia en torno a la mesa.
¿Te animas a inaugurar la temporada de meriendas de verano?
¡Feliz día!
Dori c.G.