Las dos somos de dormir poco y, además, muy madrugadoras. Raro, rarísimo, es que se nos peguen las sábanas, así que somos las primeras en levantarnos, incluidos los fines de semana. Y es en estos días de asueto cuando más disfrutamos de esas horas intempestivas, en las que casi no ha amanecido, y somos las dueñas absolutas de unas casas donde reina la paz y el silencio. A veces, miramos el móvil para ver si la otra está conectada, y entonces nos damos los buenos días, nos preguntamos qué hemos hecho la jornada anterior o qué planes tenemos para esa... Mientras tanto, una se toma el té, sentada frente a la tele, y la otra su café, al lado de la radio. Así de diferentes podemos llegar a ser... Sin embargo, la pasión por nuestras casas, por la decoración, por el vintage... nos iguala y hermana. Y porque no hemos encontrado una tele antigua plana, y que ocupe tan poco como las de ahora (¡lo moderno también sus ventajas!), que si no, sin duda, tendríamos un modelo retro, a la altura de nuestra radio...
Foto Una de nosotras se encaprichó de este modelo de radio que, no solo acompaña con su sonido, sino que también alegra la vista con su color y su diseño... Pequeñas cosas que, como reza nuestro blog, "inspiran nuestro hogar, e ilusionan nuestra vida".
Fuente: este post proviene de Retro y con Encanto, donde puedes consultar el contenido original.
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