Se trata de un dúplex donde en la planta baja, la planta de acceso, nos encontramos con un único espacio en el que está el salón, el comedor, la cocina, la zona de acceso a la vivienda y las escaleras que nos llevan a la planta superior. En ésta se encuentra el dormitorio, un pequeño despacho y el cuarto de baño.
La zona del salón está compuesta por un sofá de 3 plazas combinado con varios cojines en colores como el blanco, el gris y el negro. Junto al sofá, detalles y mobiliario que llaman la atención: una mesa de centro con ruedas y una escalera vintage que hace las veces de revistero.
Otro detalle decorativo a destacar es que en vez de colgar los cuadros directamente en la pared sobre el sofá, se utiliza una pequeña balda, lo que evita tener que hacer agujeros y además facilita cambiar las láminas interiores de los mismos.
El comedor está entre la cocina y la zona del salón, está compuesto por una gran mesa de madera lacada en color blanco. Está justo delante de 3 grandes ventanales que hacen que la estancia tenga una iluminación natural perfecta, pero dispone además de lámparas colgantes del techo con iluminación directa a la mesa del comedor, lámpara de sobremesa en cada uno de los alféizar de cada ventana, lámparas de pie junto al sofá…
Junto a la mesa de comedor, nos encontramos con una gran alacena en color blanco, perfecta para almacenar todo el menaje de la cocina.
La cocina está planteada también en color blanco, combinada con los electrodomésticos en acero y tiene forma de “L”. Pero… ¿dónde está la nevera en esta cocina? ¡Tiene truco!
Cuando son casas pequeñas cada espacio cuenta y mucho, por eso en este dúplex han aprovechado el espacio bajo la escalera y han creado armarios perfectos para el almacenamiento de la cocina... ¡y para la nevera!.
El dormitorio es un espacio bastante amplio con mucha capacidad de almacenaje, donde llama la atención el papel pintado a rayas verticales en todos sus paredes y donde destacan las lámparas de estilo industrial en color crema.
En una segunda habitación, nos encontramos con el despacho, decorado con un llamativo y original papel pintado en las paredes, en perfecta combinación con el mobiliario de color blanco.
En el baño nos encontramos con la misma sencillez y funcionalidad, tonos blancos donde se siguen aplicando pequeños toques de color con detalles tan sencillos como las toallas.
¿Te ha gustado la filosofía low cost de este precioso dúplex? ¿A qué esperas para ponerla en práctica?
En el próximo post... Vivir en menos de 50 m2
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