¡No seas gallina!

A pesar de nuestra "escasa" edad, y con la experiencia que dan esos "pocos" años que ambas tenemos, no nos caracteriza, a ninguna de las dos, el desparpajo que observamos en nuestros hijos y en sus amigos. Son muchísimo más "echaos palante" que nosotras. Quizás el hecho de haber tenido unos padres protectores haya influido en que hayamos temido tomar más iniciativas. Y eso que ahora podemos congratularnos por haber conseguido alguna que otra meta, pero siempre nos queda el gusanillo de no haber, desde un principio, desterrado el miedo a arriesgarnos. A toro pasado, nos hubiera gustado que alguien nos hubiera gritado, con amor por supuesto, eso de... ¡no seas gallina! Un empujoncito siempre ayuda y hace que te sientas con fuerza y valentia para, que sí se puede, conseguir hasta la luna. Aún estamos a tiempo. Las gallinas, que se queden en su gallinero, o en el mejor de los casos, decorando nuestros hogares.





Foto



Foto



Foto



Foto
¿Habéis tenido alguno esa sensación de no haber arriesgado lo suficiente? Ya nos contaréis...

Fuente: este post proviene de Retro y con Encanto, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

¡Cuánto tiempo sin publicar por aquí! Lo cierto es que no estamos muy activas por redes últimamente, pero nos resistimos a irnos, eso seguro... El motivo de esta publicación es enseñaros el cambio que ...

Esta historia va del horno tostadora que veis bajo la ventana, y que un buen día dejó de funcionar. Después de cerciorarnos de que no tenía arreglo posible, lo normal habría sido deshacernos de él en ...

Recibimos este silloncito de regalo. Estaba en perfecto estado, incluida la rejilla que tan delicada es... Sólo necesitaba encolarse por algunas partes, y de ahí la cuerda que veis abajo. Después de d ...

Recomendamos