Relajarnos en medio del caos

Hay una gran parte de nosotros a la que no le gusta el caos: queremos orden y simplicidad; queremos sentir que estamos al tanto de todo y que hacemos las cosas de la manera correcta.

Por eso, cuando las cosas nos parecen caóticas, luchamos por conseguir algún tipo de estabilidad:

Cuando nos sentimos abrumados y con problemas, puede que nos castiguemos e intentemos buscar un sistema para tener las cosas bajo control.

Cuando alguien se enfada con nosotros, puede que no nos guste la sensación de ser juzgados y la incertidumbre sobre cómo nos ve la gente, por lo que podemos arremeter contra ellos o dar vueltas a una historia durante días sobre lo terrible que es esa persona.

Cuando los planes no salen como esperábamos, nos sentimos como si estuviéramos en un terreno inestable, y empezamos a criticarnos o a sentir que estamos haciendo las cosas mal y que las cosas están fuera de control, y eso puede traer mucho estrés a nuestras vidas.

Cuando pensamos en exponer nuestro trabajo al mundo (escribiendo un libro o publicando un álbum, por ejemplo) … nos preocupa el temor de exponernos a que nos juzguen, y podemos decidir que no estaremos bien si eso ocurre, porque nos da demasiado miedo, y por eso posponemos la publicación de nuestro trabajo durante años.

¿Te sientes identificado con alguno de estos ejemplos? De hecho, la incertidumbre de nuestras vidas caóticas es quizás la principal causa de nuestra ansiedad, estrés, frustración, dudas, miedos, procrastinación, distracción y mucho más.

Sabemos que sentimos este caos cuando buscamos una nueva herramienta, sistema, método, táctica, plan, experto, libro sobre un tema… o nuestros teléfonos.

No hay nada malo en ninguna de estas cosas. Es sólo la forma en que normalmente respondemos al caos.

Pero si pudiéramos relajarnos en medio de ese caos, nos haría tan bien:

Estaríamos OK con la sensación de agobio, y no necesitaríamos entrar en pánico o sentirnos mal.

Simplemente daríamos el siguiente paso.

Podríamos centrarnos en una cosa a la vez.

Podríamos exponer nuestro trabajo al mundo, dejándonos llevar por la sensación de ser juzgados.

Podríamos compartir el malestar de alguien, brindando compasión en lugar de preocuparnos por si estarán bien.

Podríamos simplemente meditar, salir a caminar, hacer ejercicio, comer alimentos saludables, ocuparnos de nuestras finanzas, y hacer todo tipo de otras acciones simples y útiles que posponemos cuando nos sentimos estresados por el caos.

Y mucho, mucho más.
El entrenamiento consiste en aprender a relajarse con el caos. Y desde ese lugar, decidir el siguiente paso sencillo.

Entrenamiento con el caos

El entrenamiento consiste en notar cuando sentimos el caos… y luego utilizarlo como una especie de meditación, para respirar y luego relajarse.

Date cuenta cuando sientas el caos. No tienes que buscarlo, probablemente lo estés sintiendo ahora mismo. El mundo siempre nos dará suficiente caos para practicar. Es un regalo.

Date cuenta, y luego haz una pausa.

Respira. Profundamente en tu vientre, lentamente, dejándote relajar con cada respiración.

Luego aprende a relajarte con esta sensación de caos, incertidumbre, miedo, ansiedad, temblor, falta de fundamento.

Respira, y con cada respiración, relájate en la sensación de incertidumbre y caos.

Repite.

Autor: Leo Babauta –Fuente: ZenHabits – Tr. OrganizarteMagazine.com – Foto: xx

ZenHabits.net es un blog escrito por Leo Babauta sobre la implementación de hábitos zen en la vida diaria. Ofrece sugerencias sobre cómo vivir y también incluye cómo el mismo ha puesto en práctica estos hábitos. Trata temas como la simplificación, la vida frugal, la crianza de los hijos, la felicidad, la motivación, la eliminación de las deudas, el ahorro, la alimentación sana y la creación exitosa de buenos hábitos.

Fuente: este post proviene de Magazine Organizarte, donde puedes consultar el contenido original.
¿Vulnera este post tus derechos? Pincha aquí.
Creado:
¿Qué te ha parecido esta idea?

Esta idea proviene de:

Y estas son sus últimas ideas publicadas:

Recomendamos