Ahora que tenemos claro que lo queremos 'sí o sí' en nuestra decoración, ya sea en grandes o pequeñas dosis: ¿cómo combinarlo para que no resulte demasiado excéntrico? El riesgo de los colores tan vivos es que nos cansemos de ellos, especialmente si se trata de parte de la ornamentación de nuestra casa.
Si todavía tienes serias dudas acerca del color al que nos estamos refiriendo, he aquí un ejemplo de lo más gráfico: en esta madera envejecida podemos observarlo como color central. Sus difuminados o degradados serían las posibles vertientes, también de rigurosa tendencia. ¡Está claro que opciones tenemos y muchas!
Una vez claro el concepto y dando por hecho que nos encante, ¿has pensado que las Rebajas son el momento ideal para lanzarte a estos pequeños cambios? Recomendamos empezar por pequeñas dosis integradas en nuestra casa, especialmente jugando con entornos de confort como el salón, el comedor o la sala de estar. La clave está en no abusar y no dejarnos llevar por la ilusión que produce un momento de cambio en nuestro hogar. Con mesura y gracias al siempre práctico 'prueba-error' iremos viendo qué elementos decorativos sientan mejor en esta tonalidad y, sobre todo, dónde ubicarlos.
Empezamos por la parte de la casa donde, de alguna forma, dejamos más claro nuestro 'sentir decorativo'. Si no te atreves a modificar el mobiliario, puedes aplicarlo en los textiles, siempre tan vistosos y socorridos. Como veis, no es necesario cambiar nuestra decoración por completo. Bastará con una alfombra en este color, algunos cojines repartidos por el salón y, por qué no, elementos decorativos como un jarrón vistoso para dotar a esta estancia de la nueva moda 'color esperanza'.
Una opción es combinarlo con otros tonos de verde. Por ejemplo, en la imagen se juega con el Greenery únicamente en el puf, combinado con blanco. El resto de textiles combinan la tonalidad pistacho en un ambiente inconfundiblemente nórdico.
Y, si no queremos complicarnos la vida, recurramos a una bonita alfombra que albergue este color donde además de instaurar en el salón un ambiente cálido y acogedor estaremos dotándolo de pura tendencia.
Gracias al aire primaveral y estival que aportan las plantas podemos dotar de Greenery a nuestro salón-comedor sin necesidad de sustituir los muebles.
Hacemos una 'parada en el camino' para proponeros una idea novedosa y muy asequible. Perfectos para amantes de la Naturaleza, el relax y los paisajes, estos murales fotográficos en alta resolución, pueden ser tu gran elección. Sus imágenes nos embriagan de paz y de confort y nos hacen soñar con viajes y aventuras. ¿Qué tal si optamos por uno de ellos para utilizar el Greenary en clave fotográfica?
Fuente: Conforama
Si nos apetece arriesgar un poco más y contamos con una casa lo suficientemente grande para vestir alguna pared de este color, ¿por qué no hacer que 2017 sea el momento ideal para este cambio?
En salones decorados con tonos suaves y austeros podemos emplear nuestro gusto e imaginación para integrar todas estas ideas en clave verde Greenery. Si no cuentas con suficientes muebles todavía puedes aprovecharte del remate final de nuestras rebajas. Os mostramos al menos cuatro ideas de mobiliario auxiliar con el que combinar este color sin arriesgar, gracias al siempre triunfador estilo nórdico.
Fuente: Conforama
Una opción muy factible es la de, si contamos con sala de estar o despacho, emplear esta habitación para plasmar nuestro gusto por este color en ella. Este tipo de verde da aspecto de lugar vivo, alegre y casi lúdico por la creatividad que rezuma. Aprovechémonos de esta circunstancia para emplearlo en nuestras habitaciones auxiliares.
Apostamos por ambientes estivales como el de la fotografía, con esta falsa enredadera en los tonos de moda que firma una estancia que invita a la paz y al sosiego . Fijaos en los detalles que imperan en el aparador: frascos de cristal y libros en Greenery. ¿A que si jugamos un poco se puede conseguir este efecto sin necesidad de invertir en grandes cambios?
Definitivamente, las plantas pueden ser elementos decorativos en sí mismos. Estas fuentes de luz y de energía que llenan nuestra casa de vitalidad y suponen detalles que rompen con la seriedad de cualquier estancia.
Los textiles cobran protagonismo en estancias donde deseamos que el Greenary esté presente. Si no deseamos un mueble enteramente en este color, podemos optar por los lacados que fusionan y minimizan el efecto tan vivo que tiene, como el ejemplo de la fotografía.
Los detalles son los reyes de este enfoque decorativo. Los libros, los aparadores o muebles pequeños auxiliares, las alfombras... podemos integrar el verde vivo en un ambiente más clásico y así darle el toque deseado sin necesidad de arriesgar en vestir las paredes o los muebles más grandes de la casa.
Si empleamos a fondo nuestra imaginación, crearemos ambientes tan evocadores y oníricos como el de esta fotografía. La escalera directamente nos invita a soñar. El verde esperanza firma esta estampa de cuento.
Pero ¿y si deseamos dar una nueva vida a nuestro salón y queremos elegir un sofá que combine con detalles y elementos Greenery? Lejos de revisar una y otra vez la gama cromática y volvernos locos con la cantidad de colores y tonalidades existentes, vayamos a lo fácil: los tonos marrones, el mítico Chester o los tonos crudos y el color blanco serán nuestra mejor baza para lograr un ambiente armonioso pero con contrastes.
Fuente: Conforama
Como veis, utilizar el color de moda 'con cabeza' y sin cansar ni a nuestros invitados ni a nuestra vista como anfitriones será más fácil de lo que piensas gracias a estos consejos. ¿Se te ocurren más a ti? Un último truco: ¡Hay que aprovechar el momento 'rebajil' que estamos viviendo todavía.
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