Además, estas casas suelen contar con parcelas de dimensiones más bien generosas además de terrazas de un tamaño también poco habitual a lo que acostumbramos en Europa. Más allá de los detalles arquitectónicos siempre característicos de estas viviendas, me encanta también las infinitas posibilidades decorativas y la versatilidad de sus espacios a la hora de poder adaptarlos a cualquier estilo. Buena muestra de ello esta encantadora terraza decorada con gusto infinito en la que podemos encontrar alguna pieza que nos es muy familiar como la mecedora Eames o el práctico sillón colgante en color blanco que le da un toque realmente fresco al conjunto.
Espero que os guste y sirva de inspiración.