Cuando se trata de cuidar a nuestro bebé algo imprescindible es tener todas sus cosas bien organizadas y a mano para ser prácticos y para no perder tiempo en ir al baño a coger la crema hidratante, al armario del cuarto del bebé a coger un pañal, y mientras el bebé esperando sobre el cambiador.En función del gusto personal de los papás, de la practicidad que quieran darle al cambiador y del espacio con el que se cuenta en el dormitorio del bebé escogeremos el cambiador. Veréis que hay opciones para cubrir todas las necesidades.
Si tenemos espacio y queremos un cambiador tipo cómoda, conseguiremos tener todos los productos y cremas necesarias para el momento de cambiar al bebé bien cerca. Podemos incluir dentro de los cajones separadores para tenerlo todo aún más organizado. Incluso algunos incluyen bañera incorporada. Un consejo, si os resultan demasiado caros, que lo son, comprad una cómoda normal y añadirle el colchón cambiador arriba. Será mucho más económico.
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Eso no quiere decir que no podamos usar los cambiadores adaptables a las cunas. Si disponemos ya de un estante o armario donde poder guardar todos los productos para el cuidado del bebé podemos simplemente comprar el colchón cambiador y adaptarla a la cuna a la hora de cambiarle.
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Si por ejemplo estáis usando un cambiador tipo este de Ikea, que no tiene cajones y tan sólo tiene dos pisos a modo de estantería, lo mejor sería comprar unos pequeños cestos para poder organizar las diferentes cosas que se necesitarán.
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Además si os gustan los espacios recogidos y minimalistas podéis elegir este tipo de cambiadores plegables y que casi no ocupan espacio.
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Y para cuando estamos fuera de casa lo más cómodo son o los cambiadores de usar y tirar, o los cambiadores de viaje, que muy pronto podréis encontrar en la tienda online de El Círculo Polar.
Besos, Marta
Fuente: este post proviene de El Círculo Polar, donde puedes consultar el contenido original.
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