¿Qué es lo que te hace sentir a gusto? Leer, descansar, estar tirado en el sofá sin hacer nada Eso es el Hygge. Tu casa debe de ser el marco perfecto donde poder disfrutar de estos momentos de disfrute total (qué tanto nos merecemos) Hoy te cuento 5 trucos que puedes hacer para lograr que tu casa sea un hogar más Hygge. ¡Verás como es más fácil de lo que imaginas!
Seguro ya lo habrás leído por ahí. Cuando se pone algo de moda, no hay quien lo pare. Un poco como el ¿Qué pasa guapi? (menuda tortura todo el mundo diciendo lo mismo).
En fin a lo que iba, que estoy convencida de que te suena eso del Hygge, pero de lo que no lo estoy tanto, es de que sepas en qué se traduce.
en realidad, No es más que esa “ilusión” o “impulso” que nos hace levantarnos cada día con optimismo; o volver a casa después del trabajo, con ganas de “hacer algo chulo”. ¿Me sigues?
Hoy quiero contarte cómo llevarte ese optimismo hasta las puertas de tu casa, y hacer que todo ese "buen rollismo" no acabe cuando cruces la puerta... Créeme que se puede conseguir aunque vivas en 30 metros. ¡Es todo cuestión de actitud!
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Cómo hacer tu casa más feliz o "hygge"
Sobretodo cuidando los pequeños detalles, mimándola un poco y prestándole atención para que sea el lugar perfecto donde disfrutar de la vida. Sólo tú sabes cuales tus gustos y manías. Las cosas que te “dan o quitan, la vida".
Pero seguro aplicando alguna de estos trucos, logras sentirte mejor y hacer de tu casa un hogar más feliz.
#1. Disfruta tu casa
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Aunque sea pequeña, interior o no tenga ni si quiera una terraza o balcón. Ya sabes que hace más el que quiere que el que puede, así que no te rindas nunca, y no dejes de perder la ilusión por mejorarla. Una mano de pintura, unas fundas para el sofá nuevas, alguna lámpara original...
No sé vosotros, pero yo ojeando páginas que hablan de hogar, en seguida me animo y vuelvo a recobrar la ilusión por hacer cambios en casa.
El otro día miraba la web de Lionshome y pensé, ¡Yo también quiero tomar un café al sol en casa, aunque no tenga más que un balcón chiquitito! En un momento me inspiré para montar una mesa fuera, un par de sillas, algún macetero bonito... cosas simples que suman.
#2. Dedica más tiempo a lo que realmente te gusta
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Todos vamos "de cráneo" eso es cierto. Pero si te lo propones, arañando minutos de aquí y de allá puedes hacer muchas cosas. ¿Sabes eso de parar y hacer balance? Si en las grandes empresas funciona, imaginaros en casa.
De vez en cuando hay que frenar, reconsiderar y dar un repaso a lo que realmente te ocupa espacio y no necesitas. Si te encanta escuchar música ¡hazle hueco en casa! Si adoras leer, por qué no te montas una biblioteca.
Todo absolutamente todo en la vida es cuestión de prioridades. Y yo, en casa lo tengo muy claro. Lo primero es nuestro disfrute y después la estética.
#3. Cambia las telas que te envuelven
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Ahora que llega primavera, tienes la excusa perfecta para cambiar todas esas telas que visten tu casa. Desde las camas, hasta la funda del sofá o los cojines del salón.
Una funda nueva es mucho más barata que un sofá. Parecerá otro, y tu bolsillo se verá más saneado. Aplica esta idea en las toallas, paños de la cocina, o las mantitas o plaids, que tengas a la vista.
#4. Da valor a las cosas pequeñas
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Tener media hora para ti cada noche y poder disfrutar de un buen libro en tu butaca favorita. O quizás darte un baño relajante con los cascos puestos, o simplemente echar la siesta...
Ya sabes que el concepto de baño utilitario ha pasado a la historia. Ahora aunque sea un baño enano, diminuto, queremos que sea un espacio que nos haga sentir bien.
Una mano de pintura, una suelo nuevo (aunque sea adhesivo) y un mueble de baño en el que de verdad quepa todo, son cosas que te pueden ayudar a sentirte mucho mejor.
#5. Apaga la luz enciende las velas
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¿Has probado alguna vez a apagar todas las luces del salón y disfrutar solo de la tenue luz de las velas? Tiene un efecto calmante que vas a notar de inmediato. ¡Cuantas más mejor! Si además son aromáticas, tendrás un 2x1 sin darte cuenta.
Las velas con olor a canela, tomillo o romero, son perfectas para el salón. Perfume de flores en el dormitorio y vainilla o mora en el dormitorio de los peques.
¿Verdad que ya te suena más eso del hygge? ¿Cómo harías tú para conseguirlo en casa?
*fotografía portada Unsplash
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