Antes y después:
Antes teniamos un salón oscuro con el techo pintado de un marrón claro, moqueta marrón y sobre todo, unos sofás destrozados y con un estampado pasado de moda.
Y se ha convertido en un sitio vintage pero moderno, con estilo y muy acogedor :D
Un sofá de estilo vintage, un archivador viejo y algunos muebles más le dan un toque vintage pero super actual.
El diseño geométrico en la pared principal remarca el estilo y le añade un punto divertido a la pintura blanca de pared.
Además la lampara tambien geometrica le añade neutralidad y naturalidad, equilibrando el conjunto.
Y la puedes hacer tu mismo, aquí tienes el tutorial :D -> DIY: Lámpara cubo
Una estantería de baldas de madera le da calidez sin sobrecargar el espacio.
El principio de la acumulación de cuadros le aporta un extra.
Puedes ver más sobre acumulación para decorar aquí: -> Acumular, una forma de ordenar.... ¡y decorar!
¡Y nos encanta!
Además se ha incluido un escritorio antiguo con mucha personalidad y distintos puntos de luz ambiente. Cuadros personales que definen las diferentes zonas.
El conjunto resulta equilibrado, cómodo y muy acogedor... ¿A quién no le gustaría un salón así?
Cada rincón es personal e instransferible y sin embargo abierto a todo el mundo, cada punto focal de la habitación está enlazado de forma que el conjunto es muy coherente.
Cada detalle aporta y nutre el espacio.
¡En definitiva, una transformación de 10!
Vía: VintagerevivalsEspero que os haya gustado este salón tanto como a mí. :D
¡Salud!
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