A veces, para conseguir la mejor reforma de un espacio, no es necesario hacer una obra compleja. Ocurre sobre todo en espacios como la cocina y el cuarto de baño, donde las obras implican mucha logística, tiempo y también una inversión económica elevada. Para dar un lavado de cara a dichas estancias, puedes optar por cambiar el color de los azulejos de las paredes, con productos específicos para ello. Si quieres saber cómo pintar azulejos con pintura para interiores, sigue leyendo.
Pintura para interiores
En realidad, la pintura para interiores destinada a pintar azulejos o incluso muebles, no es una pintura normal. Se trata de un esmalte creado específicamente para adherirse a ese tipo de superficies sin dejar poros o imperfecciones, y consiguiendo un acabado más duro y elástico.
Estos esmaltes se ofrecen en diversos acabados y colores, que son mate, satinado y brillo, aunque el brillo solo se recomienda en azulejos que se encuentren en un buen estado previo. Además, pueden encontrarse esmaltes realizados sobre una base de agua o sobre una base de aceite, cada tipo con sus propias características.
Los esmaltes sintéticos, realizados a base de aceite, dan un acabado más brillante. Son resistentes a la humedad y al uso diario, pero pueden amarillear con el tiempo.
Los esmaltes acrílicos, a base de agua, tienen un acabado menos brillante. Resisten las manchas y son lavables con agua y jabón. No contienen disolventes, por lo que huelen menos y son respetuosos con el medio ambiente.
En cualquier caso, estos esmaltes se pueden aplicar directamente sobre la superficie, consiguiendo además un acabado uniforme, sin marcas y sin imperfecciones.
Cómo pintar azulejos
El proceso para pintar azulejos antiguos es bastante sencillo, especialmente si lo realiza un profesional con experiencia. Como consejo, apuesta por un servicio de confianza para lograr el resultado que esperas, porque de otro modo podría no ser satisfactorio.
El primer paso es eliminar cualquier elemento que haya en las paredes, como adornos, colgadores, etc. Es importante que la superficie esté limpia y desengrasada, para lo que es necesario limpiar a conciencia cada azulejo con agua y jabón, haciendo especial hincapié en las juntas. Seguidamente, se puede dejar secar al aire o secar con un paño seco, a ser posible de microfibra.
Los esmaltes para azulejos no requieren una capa previa de imprimación, aunque puede darse para conseguir una mejor adherencia. Seguidamente, se aplica la pintura disuelta sobre los azulejos, utilizando para ello una brocha para las juntas y un rodillo para la superficie lisa. Tras la primera mano de pintura, es necesario dejar secar durante el tiempo recomendado por el fabricante, y aplicar una segunda mano para un mejor acabado.
Finalmente, es posible aplicar un protector sobre el esmalte para conseguir mayor resistencia y para mejorar el acabado, que puede ser brillo o mate, siempre antes de 48 horas para garantizar la adherencia.
Ahora que ya sabes cómo pintar azulejos con pintura para interiores, puedes conseguir que tu vivienda se vea completamente renovada sin necesidad de realizar una obra de mayor dimensión. Si necesitas un presupuesto profesional, contacta con nosotros para que podamos ofrecerte el mejor servicio adaptado a tus circunstancias.
Este artículo es un contenido original del blog de VipReformas.es