Me dio por pensar que algunas propuestas decorativas son más estéticas que prácticas, porque cuando vives en pareja, rara vez tienes el mismo horario y ritmo de sueño, así que me imagino que si tu pareja entra a trabajar una hora antes que tú, tienes que soportar el ruido del agua corriendo, la ducha, la maquinilla de afeitar, el secador del pelo....
En fin, que me parece una pésima solución, sólo apta para poseedores de sueños profundisimos!