Lo reconozco, la costura es mi gran asignatura pendiente ¡Pero se me hace tan cuesta arriba! Lo bueno es que, al prescindir totalmente de la aguja y el dedal, exprimo las ideas hasta conseguir mi objetivo como sea, y si encima es DIY y lo low cost, ya es la pera limonera.
Esta idea la encontré en el blog de A pair and a spare. Una forma chulísima y rápida de estrenar cortinas nuevas cada poco tiempo, sin complicarse prácticamente nada la cabeza. ¡Ya veréis que idea tan chula!
Algunos os acordaréis de que hace ya algún tiempo retiré todas las cortinas de casa. Con la alergia del enano que está a punto de cederme el título porque no para de crecer, era imposible mantener ácaros y otros bichos a raya.
Así que me pasé a los estores, y genial. Pero no dejo de reconocer que una cortina queda súper dulce, además en cualquier ambiente.
No creo que cuelgue ninguna cortina en años por el tema que os he comentado, pero si estáis libres de este problema, ni os lo penséis porque queda súper chulo y sin complicaciones de cabeza.
DIY Cortinas nuevas
Materiales que debes preparar:
Aquí está la genialidad de esta idea. Normalmente iríamos a buscar una tela bien bonita y fácil de lavar. Pero, eso nos obligaría a hacer una orilla (y puag, ya hemos topado otra vez con el problema de la aguja).
¿Qué hacemos entonces? Fácil, buscamos algo que ya la tenga hecha. Y eso es ¡Una sábana!
Igual de bonita, fácil de mantener, del color que queramos, y lo suficientemente grande para cubrir la ventana. Si fuera muy grandota, siempre podríamos poner más de una caída correlativa.
¿Y cómo la enganchamos? Con otra cosa bastante básica: unas argollas con pinza. ¡Fácil y sencillo! Como dice mi colega del Bricomanía.
En definitiva, esto es lo que necesitarías:
La sábana en cuestión (mejor de cama grande si quieres que arrastre)
Argollas con pinza (en cualquier comercio local, macrotienda sueca o bazar)
Lápiz
Metro o cinta métrica
Alicates o algo para apretar
¿Cuál es el proceso para hacerse estas cortinas tan preciosas?
Pues ya te lo imaginarás...
Colgamos la barra de cortina (solos o en buena compañía)
Medimos el largo que querermos de la cortina (si te gusta larga o arrastrando, acuérdate de sumarle).
Ahora mide la sábana, y hazle el dobladillo (con el lápiz y la cinta métrica marca por donde irá el doble).
Pásale la plancha para fijar el doble. Y engancha las argollas.
Cuelga en la barra directamente, o bien, si no la quieres soltar, abre las argollas y vuelve a cerrarlas una vez colgada.
¡Presume de cortinas nuevas en IG! Imprescindible.
Por supuesto, más datos, detalles y mogollón de ideas bonitas en el blog de A pair and a spare.
¿Qué os ha parecido la idea para estrenar cortinas? ¿Habéis hecho algo parecido antes? Ya me contaréis...