Se ha conseguido desarrollar un programa distributivo que prioriza y simplifica las necesidades de un espacio tan pequeño como éste, dando como resultado un hogar versátil, funcional y con estilo. Su estilo es funcional y urbano y nace de las limitaciones de las nuevas construcciones, que se caracterizan por la falta de espacio y la ausencia de detalles, junto a un nuevo concepto de vida urbana, donde priman ante todo, la comodidad y el pragmatismo. El edificio dónde se sitúa este apartamento, data de 1880 y aún conserva el solado de roble original. Los altos techos aseguran que la luz natural brillante proviniente de las dos ventanas se reflejen y distribuyan por toda la planta, ofreciendo una paleta de base neutra que permita diseñar el lugar utilizando colores oscuros en mobiliario y complementos decorativos.
Desde el pasillo, se accesde a la sala de estar - dormitorio, el baño y la cocina, así que no hay ningún espacio que quede sin utilizar. Con una decoración vibrante en tonos chocolate y crema, el interior de marcado carácter masculino, le confiere un aire temporal, económico y de aprovechamiento del espacio. En la cocina blanca se rompe la uniformidad a través de la pared de azulejos en formato 20x20 negro y con las banquetas rojas.
El mini espacio resulta ser un gran ejemplo de cómo, a pesar de la falta de espacio, se pueden conseguir hogares acogedores y funcionales.
¿a que es todo un ejercicio de estilo?
¡Feliz día a todos!
Fotografías [] Freshome
VirlovaStyle
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