La casa de hoy es un claro ejemplo de que la buena decoración no está reñida con el espacio. En una superficie de 38 metros cuadrados, este pequeño apartamento es toda una lección de buen gusto. El salón-comedor comparte espacio con el dormitorio y una cocina y un baño independientes completan el equipamiento del piso.
Blanco y colores pastel se funden para dar una sensación de armonía a la que los cuadros de mariposas y muy pocos elementos decorativos contribuyen de manera positiva. En una palabra, este apartamento cumple a la perfección con la premisa de "menos es más".
Vía: Planet Deco