Pues si miramos un poco a nuestro alrededor nos daremos cuenta de que estamos rodeados de ellas! Es más que conocido su uso para servir aperitivos y platos, pero se usa también para decorar cocinas o habitaciones de niños. Aquí en Francia es difícil encontrar un restaurante que no las tenga, es más, la pizarra ( ardoise en francés), se convierte directamente en la carta, así se ahorran el hacer esos librillos plastificados que tan poco nos gustan!
Os dejamos con algunos ejemplos que nos han inspirado.
Esta de estilo más clásico nos ha encantado, pero no hay que olvidar que el no tenerla limpia puede dar un aspecto de desorden si no se tiene la cocina en perfecto estado!
Esta cocina verde nos ha enamorado. El verde no es un color que me guste demasiado para interiores, sin embargo, en su justa medida y mezclado adecuadamente puede dar resultados tan buenos como éste.
Tened muy en cuenta que la pizarra tiene un color muy oscuro, por eso hay que tener cuidado con su uso. Si lo queremos usar para toda una pared tendremos que intentar combinarlo con colores muy claros para contrarrestar y dar un poco de luz y amplitud. Si nuestra cocina es pequeña y oscura, correremos el riesgo de potenciar estos defectos en lugar de intentar suavizarlos. Si embargo tenemos la opción de pintar la puerta por detrás, la puerta de un armario, o hacer como en esta cocina, que optan por poner la pizarra (en esta caso no es pintura) en una zona pequeña aprovechada con baldas:
Bonne soirée!
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