Una de las primeras cosas que tenemos que tener preparada para la llegada de la Navidad, o mejor dicho... la primera, es el calendario de adviento - más ideas aquí.
Si eres adulto puedes omitirlo y no hacerlo (aunque a mi me hace ilusión igual...) pero si tienes niños en casa, tienes que hacerlo si o sí! Parece una tontería, pero abrir cada día un número y encontrar una chocolatina o algo especial hace que afrontes ese día con más energía y positividad.
Para hacer éste conté con la ayuda de una amiga, que la verdad que hizo que el momento fuera muchísimo más entretenido si cabe. Así que os recomiendo que no lo hagáis solos: hacerlo en familia, con un amigo o acompañados de vuestra pareja. Y otra recomendación es que intentéis aprovechar cosas que tengáis en casa: papeles, blondas, sobres, cordel, rollos de papel de váter, etc. Es algo que seguramente cuándo llegue enero tiraréis a la basura así que, si os ha costado poquito hacerlo os dolerá menos.
He hecho una opción muy sencilla pero que creo que queda muy bien con la decoración que tengo en casa. Simplemente estampamos los números del 1 al 25 en el centro de la blonda, rellenamos los sobres y lo sujetamos todo con cuerda y unas pincitas. Ya véis, es una opción económica y a la vez, suave y delicada. El tronco que recogimos en la montaña le acaba de dar el toque.
¿Qué os parece? ¿Ya habéis hecho el vuestro?
¡Quiero verlos! jiji