Cuantas veces encontramos cosas en la calle que por su mal estado ni nos fijamos en ellas?Pues ese no es mi caso, porque yo me fijo en todo lo que me encuentro.... A todo le veo posibilidades....jaja.
Hace un par de semanas iba haciendo mi ruta diaria con mis pequeñas Tuki y Apple y a pocos metros de llegar a casa me encontré algo que tenía muy buena pinta, al principio no se sabía muy bien qué era.... Parecía la parte de arriba de una bobina de cable y allá que me fui a ver de qué se trataba... Cual fue mi sorpresa cuando ví que era una mesa. De pronto me imaginé lo bien que quedaría en mi nuevo chill out del jardín... Así que sin pensarlo me cogí la mesa, me la puse debajo del brazo y con mis dos pequeñas y la mesa para mi casa que me fui. Menos mal que estaba cerca...
Una vez llegué a casa me puse a inspeccionarla.... La madera estaba muy deteriorada por haber estado expuesta mucho tiempo al sol, las patas (que eran plegables) estaban rotas, pero nada que no pudiera arreglarse.
Éste era el estado de la mesa cuando me la encontré:
Lo primero que hice fue rociar la mesa con insecticida para eliminar los posibles bichitos que tuviera, porque alguno había....
Lijé muy bien todas las partes de la mesa, tanto el tablero como las patas, porque había restos del antiguo barniz, comido por el sol.
Después del lijado, cepillé para eliminar cualquier resto de polvo o suciedad.
Por último, sólo quedaba pintar la mesa. También se puede barnizar simplemente, pero como yo quería ponerla en el chill out, y los sofás que hice con palets eran verdes, quise pintar la mesa también de color verde.
Y ésta es la transformación de mi mesa encontrada en la calle: