Elegimos un color "Crema de café" de pintura acrílica para aclarar el tono de la madera. Un papel traído del famoso viaje a Nueva York de una de nosotras (y que la otra no acaba de asumir en cuanto a envidia cochina se refiere), nos pareció idóneo para decorar la puerta de nuestro pequeño mueble. Los motivos postales casaban a la perfección con uno de los usos que le daríamos al mismo. ¡Manos a la obra pues!
He aquí un detalle del suave lijado que dimos por algunas zonas...
Conservamos las bisagras originales (previa limpieza de las mismas). Y añadimos un imán que permite que la puerta se mantenga cerrada, nuevos cáncamos y un diminuto pomo dorado.
Y este es el resultado obtenido. Un pequeño auxiliar con doble uso: un porta llaves con zona para descansar las cartas.
Pues ya está a la venta en nuestra tienda Rastro.
Y ahora nos pasamos a ver el Finde Frugal de Marcela en su bonito blog Colorín Colorado a ver las demás propuestas, que seguro nos sorprenden ¿Nos acompañáis?