Imágenes: TOC TOC vintage
Este año mi visita al Festivalet tenía tres objetivos principales. Por un lado, poder saludar a los responsables de las marcas que están en mi tienda. Me encantó charlar un rato con Inma de Umbilical, y conocer a su hermana. Las dos no dejaban de atender a gente en su bonito stand. También pude compartir un rato con Naiara de Batlló Concept, rodeada de sus piezas y de sus portalámparas mamba, que ya os anuncio que me traje unas cuantas para la tienda. Y me pasé por el stand de Casa Atlántica donde estaba Lester, muy atareado vendiendo maceteros. Además, me encantó conocer a Verónica de Depeapa, y a Nathalie Ouederni, ambas simpatiquísimas.
Por otra parte, esta edición era la excusa perfecta para poder desvirtualizar por fin a María de la tienda de Madrid Contigo Mondo, que traía su nueva colección MON, realmente preciosa (Francesc, mi compañero, me confesó que había sido el expositor que más le había gustado). Y también desde Madrid, llegó Chejo del blog La bici azul, uno de los primeros que empecé a leer, y del que soy fiel seguidora. Me hizo especial ilusión conocerla en persona, y también a su marido Ángel. Hacen una pareja rebonita de verdad. También pude reencontrarme con Lorena de Nasualua y aprovechar para ‘pescar’ un estuche en el stand de DonFisher, donde se encontraba atendiendo a los visitantes.
De hecho, irse del Festivalet con las manos vacías es casi imposible, así que también pude hacer otras compras, una de ellas en el expositor de Mamita Botanical, una marca de cosmética facial natural que descubrí en esta edición y de la que ya me declaro fan de su crema de día. Y es que éste era mi tercer objetivo: conocer nuevas marcas. Mi top 3 son casualmente, marcas que trabajan la cerámica: la francesa Dodo Toucan, la catalana Working in the Redwoods, y la japonesa (aunque afincada en Barcelona) Imuusk.
Así que esta edición del Festivalet no pudo dejarme mejor sabor de boca. Hasta el año que viene!