A menudo nos preocupamos por la imagen de nuestro hall, el salón o la cocina, pero ¿Qué pasa con el dormitorio? ¿No se te ha ocurrido pensar que es hora de darle un repaso? Hoy te cuento 10 cosas que no pueden faltar en un dormitorio pequeño para que luzca como el de las revistas, y sobretodo te haga sentir bien.
Imprescindibles en dormitorios "minis"
1. Una cama que abrigue tus sueños
Esto es evidente. Si no duermes bien, todo el día vas a ir dando tumbos de un lado a otro. En habitaciones grandes y con capacidad de almacenamiento extra, nos podemos permitir el lujo de elegir la cama que nos entre por el ojo. Pero si los metros escasean entonces es posible que además de cómoda y bonita, necesites que tenga capacidad para almacenar ropa de cama, o "trapitos" de otras temporadas.
Recuerda que es importante elegir un somier acorde al colchón que elijas. Nosotros nos cargamos un colchón visco, por colocarlo sobre un canapé forrado de piel, que no respiraba. Mi consejo, es que elijas el modelo de cama que elijas, el colchón pueda respirar.
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2. Bien vestidas
Ahora que ya tenemos cama, es importante vestirla bien. Y con esto me refiero tanto a su cara visible, como a la menos visible. Es siempre un acierto elegir linos o tejidos 100% algodón para tus sábanas. No escatimes con el tamaño de la ropa de cama, si tiene unas medidas amplias se verá con más volumen y lucirá mucho más.
En diezxdiez recomiendan por ejemplo en un colchón de 150 de ancho, la bajera sea de 240 de ancho, lo mismo que el edredón o nórdico. Recuerda que queda bastante feo que se vean las patas del somier, hazte con un faldón que disimule esto y definitivamente se verá más bonita. La guinda serán los cojines, alguna manta en los pies, un plaid... ¡A tu aire!
3. Un cabecero que vaya contigo
Vale que no tengamos sitio, pero eso es inconveniente para dejar una cama preciosa. Si a pesar de la falta de espacio quieres poner un cabecero, adelante, pero elige con medida. Mejor los que sólo son tableros finos de pocos centímetros de fondo.
En situaciones muy "minis", queda fenomenal forrar la pared con madera, poner papel pintado, levantar un muro a media altura que haga de repisa y pueda incorporar alguna luz. A grandes males, mejores soluciones. Esta cabecero de azulejos, por ejemplo, no puede ser más espectacular y a penas come centímetros.
Eric Vökel
4. Un armario que cumpla tus expectativas
Por pequeñita que sea la habitación, hay que intentar sacarle fruto para poder tener a mano nuestra ropa y todos los complementos.
Ahora hay armarios exentos que se camuflan bien con la pared y gracias a sus puertas correderas son accesibles en espacios muy pequeños. También puedes recurrir a un vestidor abierto, aunque tendrás que ser más cuidadoso con el orden. O bien, prescindir de la mesita y añadir alguna cómoda. ¡Mira abajo!
5. Mesitas ¿Si o no?
Ese es el tema. Una mesita puede necesitarse si no hay ningún apoyo junto a la cama, o puede eliminarse totalmente si no es para ti relevante.
En caso de espacios pequeñitos, una solución bastante chula es aprovechar el hueco de una simple mesita para poner una cómoda (así es 2x1). También puedes usar otro mueble común como mesita. Hay muchas soluciones. Si necesitas inspiración pásate por mesitas de noche alternativas y las verás todas.
En la foto por ejemplo han dicho adiós a la distribución clásica y en su lugar han puesto un mueble volado en el que caben muchas cosas. Al Feng Shui no creo que le guste, pero si a ti, sí... adelante.
Construye Hogar
6. Alfombras hasta en verano
Quien dijo que las alfombras sólo eran para el invierno, estaba muy equivocado. En el dormitorio quedan sensacional todo el año. Eso sí, su material debe variar según la estación del año.
En invierno nos apetece mucho poner los pies en una de pelo largo, en verano en cambio es tiempo de materiales vegetales mucho más fresquitos (fibra vegetal, yute...).
7. Aunque sea mini, trabaja bien esa ventana
En dormitorios pequeños la luz juega prácticamente el papel más importante, porque como te imaginarás si encima de pequeña es oscura, se nos va a caer encima.
¿Cómo hacemos para darle luz? Cubriendo las ventanas con unas cortinas o estores que den intimidad pero no cieguen el paso de luz. Mis preferidas son las cortinas de lino (sin dobles caídas ni nada ostentoso), y los estores de tejido tipo screen.
8. Ese algo distinto
Sabes eso de ¡chiquitito pero matón! Pues eso. Tú dormitorio tiene que tener algo que le de encanto, estilo, que lo haga fotogénico. Por ejemplo, añádele flores naturales en un cuenco o en una botella de vidrio que recicles. O si bien algunas ramas de eucalipto o brezo.
Alguna cesta de mimbre a un lado de la cama, donde dejes alguna manta a la vista. Unos cojines bonitos, algunas velas aromáticas. Cosas tontas que marquen un antes y un después.
Deleite Desing
9. Dale luz
Y para iluminar cuando se haga de noche, en realidad con una luz general, y un par de focos, aunque sean de pinza, tendremos suficiente.
Puedes combinar alguna lámpara colgante con iluminación focal. A mi me pierden ahora los focos de superficie, pero como te decía hay margen para poner lo que quieras. Eso sí, cuidado con el tamaño, recuerda que aquí todo es mini. ¡Hasta una bombilla desnuda te puede quedar genial!
10. Un espejo, dos, tres
Benditos espejos que siempre suman luz. En un dormitorio peque quedan ideales donde los pongas. Algunos valientes los ponen en el cabecero, otros sobre una cómoda. De tamaño grande, mediano, pequeñito. Solos o en conjunto.
Quedan sensacional en grupos impares, pero lo cierto es que, son muy agradecidos y donde los pongas te van a sumar.
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¿Qué ta parecen estas ideas? ¿Te has quedado con alguna para decorar tu dormitorio mini?
*Foto portada Pinterest
