Este año muchos han tenido que adaptar sus espacios para trabajar desde casa, ya sea en una estancia independiente o dentro de otros espacios mayores como el salón.
En este artículo explicaremos lo que debes tomar en cuenta para planificar la iluminación de vuestra oficina en casa y optimizar tu espacio para trabajar o estudiar en buenas condiciones.
¿Cuánta luz debo tener? La mejor forma para determinar el nivel de iluminación indicado será el estándar europeo DIN EN 12464-1 para centros de trabajo en interiores. En él se recogen, entro otras, las siguientes recomendaciones:
Área de trabajo: 500 lux.
Alrededores área: 300 lux.
Pasillos/otros: 100 lux.
Como la oficina es un espacio para teletrabajo o para estudiar tomaremos como referencia los dos primeros puntos.
Planificación del espacio Lo primero que debemos tener en cuenta es la ubicación de los diferentes elementos y accesorios con los que contará nuestro lugar de trabajo (mesa, estanterías, ordenador…).
Trataremos de que la distribución de estos elementos nos permita aprovechar de forma adecuada la luz natural, si la hay, y nos aporte el máximo nivel de confort y ergonomía.
¿Qué temperatura de color se debe utilizar?
Como sabemos la temperatura de color (CCT) es un parámetro que define la tonalidad de la luz, desde el cálido (más amarillo) hasta el frío (más azulado).
En general, se aconseja utilizar luces cuya CCT esté por encima de 4000K, aunque nuestra recomendación es utilizar luminarias que aporten una luz más fría, que supondría una temperatura por encima de los 5500K.
Esto es debido a que la parte azul del espectro nos ayuda a mantenernos activos y concentrados. Además, a partir de cierto nivel de iluminación la luz fría resulta más agradable que la cálida.
Claves para iluminar nuestra ‘home office’ La estrategia general siempre que afrontamos la planificación de la iluminación es la de iluminar por capas (luz general, luz de trabajo, luz de acento). En esta ocasión, prestaremos especial atención al uso de la luz indirecta, el correcto aprovechamiento de la luz natural y en tener una luz de trabajo adecuada.
Aprovechar la luz natural La luz natural resulta beneficiosa en la iluminación de cualquier estancia y nuestra zona de trabajo doméstica no es una excepción. Respecto a las direcciones de la luz, siempre es mejor que la luz llegue a la mesa desde un lateral para evitar sombras o que resulte demasiado molesta.
Iluminación indirecta Para evitar molestos destellos y deslumbramientos en la zona de trabajo el uso de luz indirecta se vuelve esencial. Además, si trabajamos con el ordenador, conseguiremos que se nos canse menos la vista, algo que sin duda agradeceremos.
Para conseguir una iluminación uniforme y evitar destellos, lo más sencillo es utilizar lámparas y apliques que cuenten con un difusor traslúcido. Otra opción muy interesante son las luminarias que alumbran hacia arriba, la que emiten se refleja en el techo y las paredes.
Una buena luz de trabajo Como ya hemos comentado en otras ocasiones, necesitamos tener un punto de luz destinado en exclusiva a alumbrar la superficie de trabajo. Un flexo LED o una lámpara de mesa será suficiente para iluminar el área de forma correcta.
Considerad todas estas claves y te garantizamos que tu área de trabajo será todo un éxito, más cómoda, cálida y tendrá tu propio estilo. ¡Disfrútala!