Asegura Daniel Pennac, escritor francés y autor, entre otros títulos, del libro “El mal de escuela”, que “El verbo leer no soporta el imperativo” y no podemos estar más de acuerdo. La lectura ha de ser un acto de voluntad, por todos los beneficios que la misma nos aporta. Y es que, ¿quién no ha perdido la noción del tiempo leyendo un buen libro?
Pero para que esto suceda, es importante fomentar la lectura en los niños desde la más temprana edad. Siempre con libros acordes a su desarrollo, a sus gustos y, por supuesto, haciéndoles accesibles la lectura. Esta será la única manera en la que puedan beneficiarse de ellos.
Por eso, hoy queremos centrarnos en cómo crear, dentro de las habitaciones infantiles, rincones de lectura que inviten a los peques a disfrutar de los libros, incluso cuando tú no estás delante.
Beneficios de fomentar la lectura en niños
Cada niño es un mundo y su desarrollo depende de numerosos factores. Sin embargo, los expertos en salud y psicología infantil coinciden en señalar que inculcar la lectura en nuestros hijos, desde su más temprana edad tiene, entre otros, los siguientes beneficios:Fomenta su desarrollo cognitivo
Ayuda a que memoricen mejor
Desarrolla su lado creativo
Mejora sus habilidades sociales
Amplía su vocabulario
Mejora su concentración
Teniendo en cuenta estos datos, sin duda, merece la pena dedicar tiempo a leerles libros desde niños, compartir y debatir con ellos, fomentar ese gusto por la lectura y conseguir que, sin necesidad de que tú les digas nada, encuentren un auténtico placer en leer.
Otro punto importante es crear ambientes que inviten a que estos niños quieran leer libros, que queden accesibles para ellos y donde se sientan cómodos para hacerlo: hablamos de los rincones de lectura que puedes encontrar en una habitación infantil.
Rincones de lectura infantil
Hablamos de rincones, no de bibliotecas o de habitaciones de lectura. Esto quiere decir que habrá ocasiones en las que tengamos mucho espacio y podamos decorarlo de una forma y otras en las que el espacio es pequeño y será cuestión de hacer uso de nuestra creatividad y crear esos rincones a base de estanterías y otros productos que nos ayuden a conseguirlo.
Pero, vamos a hacer una cosa: nosotros te proponemos los elementos básicos que, consideramos, debería de tener un rincón de lectura “ideal” y, después, tú lo adaptas a tu situación. Por supuesto, puedes contar, desde ya, con nuestro asesoramiento.
Empecemos por lo básico, las estanterías infantiles. En este punto puedes elegir desde las estanterías básicas para cuentos, como ésta o ésta, que son muy versátiles ya que puedes poner una, dos o tres, depediendo del espacio y además, puedes colocarlas a su altura. Si lo que quieres es una estantería más completa, las Tidy Books o las estanterías de tres baldas tienen una gran capacidad para cuentos y libros. Pero si lo que buscas es un mueble evolutivo, que le sirva para etapas futuras de su vida, esta estantería con huecos es una muy buena opción.
También puedes optar por que ese rincón de lectura se haga en un espacio dedicado sólo a ello, como pueden ser las cabañas o tippies que tanto gustan a los niños. Lo bueno de estos productos es que tienes muchas opciones y colores para que la pieza se adapte al estilo que más te guste.
Por supuesto, un rincón de lectura ha de ser cómodo y cálido. Aquí es donde entran en escena las alfombras infantiles y, no me digas por qué, pero para estos espacios se utilizan, muchas veces, las redondas. Sin duda, fomentan la lectura en familia, pero también son agradables para lecturas en solitario y disfrutar de más espacio.
Si no nos gusta esta opción, también tenemos las colchonetas y los puffs infantiles que, además, se pueden desplazar a otros rincones de la casa. Las primeras son más versátiles y los segundos, son la perdición de niños y mayores. ¡Les vuelven locos!
Juegos o, más bien, juguetes, que muchas veces nos los encontramos en los rincones de lectura, por lo que también es conveniente tener un almacenaje de juguetes a mano, que bien pueden ser los versátiles sacos de juguetes que te sirven, a su vez, de manta de juegos o, por ejemplo, otros tan originales como las cajas de almacenaje de Lego, que están gustando un montón y las tienes en diferentes colores y tamaños.
Nos despedimos con un “colorín, colorado”, pero antes de que se acabe el cuento, déjanos decirte que estaremos encantados de asesorarte en la decoración del rincón de lectura de tus peques y que si te ha gustado este artículo, además de comentarlo, lo compartas en tus redes, para que otros padres también se puedan beneficiar de él. ¡Hasta el próximo post!