Cuando nos disponemos a decorar nuestro dormitorio lo mejor es elegir el color de las paredes, qué revestimientos vamos a utilizar y luego poner los muebles. Luego de haber completado el primer paso llegara lo mejor lo cual es elegir los textiles que l darán ese toque personal a nuestra decoración.
Colchas, nórdicos, plaid, cojines, cortinas, estores... En el instante en que llegamos al mundo de los textiles encontramos combinaciones infinitas, lo que hace muy fácil que nos perdamos en ellos. Para conocer las tendencias de primera mano y saber cómo combinarlas hemos hablado con las firmas más importantes del mundo de la decoración en textiles que nos dan las claves... Gancedo a través de sus imágenes llenas de romanticismo y delicadeza, nos confirma que los textiles y los pequeños detalles son los que nos ayudan a dar nuestro toque personal.
Desde la firma nos recomiendan no recargar los colores ni formas muy agobiantes, para así poder fomentar la desconexión y crear un ambiente de paz y relajación. Por ello la propuesta se base en combinar mobiliario blanco con tejidos en tonos neutros y algún matiz floral en tonos pasteles.
Por último, nos animan a buscar alfombras que coordinen los textiles, nos aíslen del frío y buscar muebles que den personalidad a la estancia como una butaca en un color intenso.
Textura nos trae imágenes de camas muy románticas y donde los tonos malvas, violetas y morados son los protagonistas. Este tipo de colores siempre crea entornos relajados, mucho más si los combinamos con beiges y marrones claros.
Al mismo tiempo se han usado muebles en tonos neutros para dar un mayor protagonismo a los textiles, de esta forma también será más sencillo introducir cambios en la decoración.
IKEA aunque mantiene la idea de mobiliario neutro en favor de una mayor personalización del textil, nos trae algunas de las colecciones más juveniles y desenfadadas. En sus imágenes también se apuesta por completar la decoración con multitud de cojines, alfombras y cortinas en los mismo tonos.
El morado es un color muy presente en todas las colecciones, al igual que los azules y los estamapados atrevidos que encontramos, mayoritariamente, en la ropa de cama.