Ya las vacaciones están cerca y es hora de que descanses. Seguro pensarás que te las tienes merecidas después de tantos meses de trabajo, lo que no sabes es que no sólo te las mereces sino que las necesitas para que tu productividad laboral aumenta.
El descanso es uno de los momentos más esperados del año. No hacerlo, en cambio, puede repercutir en el desarrollo profesional.
Así que sí, las vacaciones no sólo te las mereces sino que tu trabajo las necesita. Si todavía no nos crees, te dejamos aquí seis razones por las que tomarte vacaciones aumenta la productividad laboral.
¿Por qué es bueno para vos tomarte unas vacaciones?
Lo cierto es que las vacaciones son mucho más útiles para la productividad laboral que la saturación mental. Un día libre de vez en cuando puede mejorar tu concentración, mientras que las largas pausas aumentan la motivación. El impacto que tener unas vacaciones en la salud mental es profundo.La mayoría de las personas tienen una mejor perspectiva de vida y están más motivadas para lograr sus objetivos después de unas vacaciones.
Francine Lederer – psicóloga clínica en Los Ángeles
Además, un descanso ayuda a recuperar el entusiasmo y la creatividad, de manera que después de las vacaciones los empleados volverán con las pilas cargadas y nuevas ideas.
¿Por qué aumenta la productividad al tomar vacaciones?
Se renuevan energías: Tomar vacaciones tiene los mismos efectos que dormir después de un día agotador. Descansas el cuerpo y la mente y eso te permite renovar tus energías y ganas de trabajar, lo cual se traduce en un mayor rendimiento laboral al momento de reincorporarte.Se planifica con efectividad: Lejos de la presión y el estrés del día a día laboral, la mente se relaja y puedes pensar con tiempo y claridad cómo resolver esos problemas que dejaste pendiente o cómo hacer tus tareas más rápido y con mayor eficiencia. Sino, simplemente puedes organizar y planificar tu regreso con calma, esto aumenta la productividad laboral que tienes.
La perspectiva de las vacaciones ya aumenta la productividad: Aunque no te lo creas, la simple idea de alejarnos de la oficina por unos días y descansar, de irnos a esos sitios turísticos tan populares o simplemente poder dormir hasta tarde en nuestras casas nos hace más eficaces en nuestro trabajo. ¿Por qué? Simple, empezamos a trabajar más rápido en la medida que se acercan las fechas de vacaciones para poder tener tiempo de planificarlas.
Varía la frecuencia: No se necesitan vacaciones largas cada dos meses para aumentar la productividad, basta con dos días o una semana para que el trabajador renueve energías y se auto-incentive a trabajar, en especial si estas vacaciones las paga la empresa.
De hecho, se ha demostrado que el trabajador que cada tres o cuatro meses va a alguna actividad recreativa organizada por la empresa (algún club deportivo, por ejemplo) aumenta la productividad laboral porque se siente “entendido” por sus jefes y siente que debe devolverles las atenciones en eficiencia laboral.
Tomarse días libres cada tanto ayuda a desestresarse y liberar las presiones.
Arma un lugar en tu casa que sea tu refugio, que te gusta, que esté decorado a tu manera, con tus libros, tu música, tus objetos. Allí estarás a salvo y será tu lugar terapéutica para huir del estrés.
¿Y un hobby? Todos tenemos que cosas que nos gustan hacer. La clave es comenzar a priorizar ese tiempo para realizar lo que nos gusta.
Por supuesto, como siempre, el ejercicio. Pero con metas, objetivos y disfrutándolo.
Así que ¿Qué estás esperando? ¡Comienza ya a planificar tus vacaciones! ¡Y disfrútalas al máximo! ¡Tus jefes y tu trabajo te lo agradecerán!