Lo que nada hacia presagiar era que este simple mueble de teka, bastante castigado, se convertiría en este otro...
Después de una buena lijada y la primera capa de imprimación, le aplicamos una pintura acrilica al agua...
Nos decidimos por un papel a topos para forrar el interior y las puertas por dentro en blanco y con una plantilla de stencil pintamos otros topos más gordos...
Sustituimos los tiradores por unos en cerámica
Y así quedo después de unos cuantos días en nuestro taller...