Hoy os quiero enseñar una mezcla de verano e invierno en una sola vivienda. Es un apartamento decorado en blanco y negro, con detalles muy característicos de diseño como la silla Barcelona o la alfombra de estilo nórdico que me tiene robado el corazón.
Una de las cosas que más me ha llamado la atención, ha sido la composición de cuadros que tienen expuestos en el salón. Con unas sencillas estanterías, consiguen darle un punto de importancia a esta parte del salón. Además es un recurso económico y muy práctico si somos de los que cada dos por tres estamos cambiando la decoración de nuestra casa.
Cuando entramos en el salón, nos encontramos con un espacio amplio y lleno de luz con unas vistas al balcón increíbles. Pero la parte destinada a cocina se lleva la palma. Al haber elegido el mobiliario en blanco, la luz se potencia muchísimo más y el piso gana en metros al instante (truco fácil pero efectivo :D).
Si este apartamento ya me gustaba, cuando vi el comedor con los bancos, supe que os lo tenía que enseñar. No se porque, pero me llaman mucho más la atención los bancos que las sillas. Aunque creo que la combinación ideal, el colocar a un laso sillas y al otro, un banco porque si que es verdad que los bancos no son para todos los públicos. Pero no me podéis negar que son preciosos...
En las habitaciones, no han querido complicarse y han continuado con la misma gama cromática. ¿Qué os parece? ¿Os gustan los dormitorios sencillos?
Fuente: Planete Deco
¿Qué os ha parecido?
¿Os habéis enamorado de este balcón
como le ha pasado a mi?